Este artículo fue coescrito por Jean Johnson. Jean Johnson es una especialista en gatos y escritora para KittyNook Blog. Se especializa en brindar consejos sobre la salud y el juego de los gatos, así como información general sobre los gatos y sus razas.
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Cuando la cantidad de fluido perdida del cuerpo del gato es mayor que la cantidad ingerida, la mascota se deshidrata. Esto puede ocurrir por un número de razones, incluyendo no comer o beber lo suficiente, bochorno, vómito, diarrea, así como muchos otros factores.[1] La deshidratación es una condición grave para los gatos puesto que el equilibrio adecuado de fluidos es crucial para mantener la temperatura corporal, quitar residuos, mantener una circulación adecuada y asegurar el equilibrio de sistemas corporales fundamentales. Mientras más pronto puedas detectar los primeros síntomas de deshidratación en tu gato y conseguir la ayuda apropiada, más fácil será revertir la condición.
Pasos
Parte 1
Parte 1 de 2:Detectar los síntomas de deshidratación
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1Actúa inmediatamente si es necesario. Algunas causas ameritan atención médica inmediata en cualquier gato sin importar su edad o estado de salud general. Estas causas incluyen cualquier sospecha de sangrado interno, quemaduras, heridas moderadas a graves, vómito o diarrea significativa o prolongada, falta de apetito que dure más de 24 horas en un gato adulto o 12 horas en un gatito joven, respiración con la boca abierta o fiebre alta.[2]
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2Monitorea el consumo de agua de tu gato. Es sus etapas iniciales, la deshidratación es fácil de pasar por alto. De hecho, incluso los síntomas físicos más sutiles no son detectables hasta que el gato está por lo menos 4 o 5 % deshidratado.[3] Debido a la sutileza de los síntomas, debes prestar atención a cuánta agua bebe tu gato todos los días. Nota si está tomando menos o nada de agua.
- También debes asegurarte de mantener bastante agua fresca cerca para él, especialmente si vas a estar fuera por un largo periodo de tiempo, por trabajo o un paseo de todo el día.
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3Evalúa la humedad de las encías. Una forma de saber si tu gato está deshidratado es revisar sus encías. Usa tu dedo para levantar su labio superior y exponer la línea de su encía. Toca la encía con tu dedo. En un gato bien hidratado, el tejido de la encía debe sentirse húmedo. A medida que el gato se deshidrata cada vez más, sus encías comienzan a secarse. Si el tejido de la encía se siente pegajoso o viscoso, es posible que el gato esté mostrando los primeros síntomas de deshidratación.
- Si el tejido de la encía en realidad se siente seco, el gato podría estar moderada o seriamente deshidratado, dependiendo de los otros síntomas. Las encías usualmente no se sienten completamente secas hasta que el gato esté por lo menos 6 a 7 % deshidratado.[4]
- Ten en cuenta que las encías de tu gato se secarán rápidamente en el aire después de levantar el labio superior, así que necesitas evaluar la humedad inmediatamente.
- Si las encías de tu gato se sienten secas, pegajosas o viscosas, o no estás seguro de si las encías están normales o no, examina más al gato para ayudarte a decidir si la mascota está deshidratada o qué tan deshidratada está.
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4Revisa el tiempo de llenado capilar (CRT, por sus siglas en inglés) de las encías. El CRT es la cantidad de tiempo que tardan los capilares, que son vasos sanguíneos pequeños, en las encías en rellenarse con sangre. Debido a que la deshidratación reduce el volumen de la sangre, en este caso aumenta en las mascotas deshidratadas.[5] Para revisar el CRT, presiona tu dedo en la encía de tu gato y suelta. La piel debe blanquearse o volverse blanca. Si no es así, prueba de nuevo y presiona con un poco más de fuerza. Después de levantar tu dedo, cuenta el número de segundos que tarda la piel blanqueada en volver a su color normal.
- En un gato sano y bien hidratado, la piel debe regresar al color normal en menos de 2 segundos.
- En un gato moderadamente deshidratado, esto podría tardar un poco más. En casos de deshidratación más graves, este tiempo de llenado incluso podría ser visiblemente más prolongado.
- El CRT usualmente no aumenta en casos de deshidratación leve, así que un CRT elevado podría indicar deshidratación moderada a grave y garantizar atención veterinaria.
- Si las encías están muy pálidas o blancas después de presionarlas, lleva al gato al veterinario inmediatamente. Las encías pálidas pueden ser un síntoma de una deshidratación más avanzada.[6]
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5Prueba la elasticidad de la piel. Otro primer síntoma de deshidratación es una pérdida sutil de la elasticidad de la piel. Esto se vuelve más pronunciado a medida que la deshidratación empeora. Revisa la elasticidad eligiendo un área de piel a lo largo del lomo o el pecho de tu gato. Evita la piel en la parte trasera del cuello ya que es gruesa y podría dar resultados engañosos. Pellizca suavemente la piel entre dos de tus dedos y suéltala. Observa la piel que hayas pellizcado.
- En un gato sano y bien hidratado, la piel debe volver a su lugar inmediatamente. En un gato ligeramente deshidratado, es posible que la piel no regrese a su lugar tan rápido como lo haría en un animal bien hidratado.
- En un gato moderada a gravemente deshidratado, la piel será evidentemente lenta para regresar a su lugar y en un gato profundamente deshidratado, es posible que la piel se quede en la posición comprimida en lugar de regresar a su lugar.[7]
- Es importante tener en cuenta que esta prueba no siempre es completamente precisa. Los animales viejos o demacrados a menudo tienen piel menos elástica que los animales más jóvenes, así que es posible que su piel no regrese a su lugar rápidamente incluso si están bien hidratados.[8] Los gatitos menores a 6 semanas de edad tienen menos elasticidad en la piel que los gatos adultos.[9] Las mascotas con sobrepeso tienen mucha grasa subcutánea, así que podrían no tener una pérdida evidente de elasticidad en la piel hasta que estén gravemente deshidratados.[10]
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6Revisa los ojos. Los ojos de tu gato pueden darte información importante respecto a su estado de hidratación. Los ojos ligeramente hundidos en un gato por lo demás sano pueden señalar deshidratación moderada. Sin embargo, es importante notar que los gatos muy delgados, especialmente los gatos más viejos o aquellos con enfermedades crónicas, normalmente podrían tener ojos ligeramente hundidos.[11]
- Los ojos gravemente hundidos que parecen secos pueden indicar deshidratación grave. En algunos casos avanzados, el tercer párpado incluso podría estar visible.[12]
- Si los ojos parecen secos, hundidos o el tercer párpado sobresale, el gato debe recibir atención veterinaria inmediata.
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7Siente las patas. En un gato con otros síntomas de deshidratación, las patas que se sienten frías al tacto pueden indicar deshidratación moderada a grave.[13] Para evaluarlo, levanta a tu gato cuidadosamente. Sujeta su pata en la palma de tu mano y nota la temperatura. Si se siente como la temperatura normal de tu gato, entonces no está moderadamente deshidratado. Si las patas se sienten frescas o frías, podría ser un síntoma de deshidratación grave y debes llevarlo al veterinario lo más pronto posible.
Parte 2
Parte 2 de 2:Buscar tratamiento y evaluación
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1Busca asistencia veterinaria. Si tu gato muestra síntomas de deshidratación, necesitas hacer una visita al veterinario. Debes consultar con un veterinario apenas tu gato exhiba síntomas de deshidratación, ya que la condición es mucho más fácil de corregir en sus primeras etapas. Si sospechas que tu gato está moderada a gravemente deshidratado o si el animal está apático o inconsciente, lleva a tu mascota al veterinario inmediatamente.
- Hazle saber al veterinario que es una emergencia para que pueda verte más rápido. La deshidratación grave es una emergencia con riesgo de muerte.
- Además de confirmar los resultados del examen físico y evaluar la historia de tu gato, tu veterinario puede realizar pruebas para ayudar a determinar qué tan deshidratado está y decidir un curso de tratamiento apropiado.
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2Deja que el veterinario realice pruebas. Además de un examen físico, es posible que tu veterinario realice algunas pruebas básicas para evaluar el estado de deshidratación de tu gato. Algunas pruebas básicas que los veterinarios usan para evaluar la deshidratación incluyen un análisis de sangre para evaluar los hematocritos. Si los hematocritos están más altos de lo normal, tu gato probablemente está deshidratado.[14]
- Es posible que el veterinario también realice una prueba de orina para revisar su concentración. Usualmente, cuando los animales están deshidratados, los riñones concentran orina para conservar agua. Sin embargo, si tu gato tiene insuficiencia renal o un desequilibrio hormonal, podría no ser capaz de concentrar su orina apropiadamente incluso cuando esté deshidratado.[15]
- Se pueden hacer otras pruebas dependiendo de la posible causa subyacente de la deshidratación.
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3Dale a tu gato el tratamiento. Una vez que el veterinario evalúe a tu gato, calculará el grado aproximado de deshidratación y formulará un plan de tratamiento de fluidos. La mejor forma de corregir la deshidratación moderada a grave es proporcionar fluidos intravenosos. También necesitarás abordar la causa subyacente de la deshidratación en tu gato para remediar la situación en el futuro.
- En casos de deshidratación grave, se requiere una terapia agresiva de fluidos por vía intravenosa para asegurar la recuperación del gato.
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4Busca causas subyacentes en gatos enfermos. Debido a que los primeros síntomas de deshidratación son sutiles y fáciles de pasar por alto, es importante ser capaz de identificar los factores de riesgo y las situaciones potenciales de deshidratación que podrían ocasionar deshidratación en tu gato. Debes buscar causas subyacentes comunes de deshidratación tales como no comer o beber lo suficiente, orina excesiva, vómitos, diarrea, quemaduras u otros daños en la piel, sangrado interno o externo, fiebre o pérdida de fluidos dentro del cuerpo debido a sangrado interno u otro cambio de fluido inapropiado fuera de los vasos sanguíneos.
- Los gatos y gatitos enfermos o debilitados son especialmente vulnerables a esta condición. Si tu gato encaja con esta descripción, debes estar especialmente alerta a estos factores. Estos siempre son causas para alarmarse y garantizan atención veterinaria. [16]
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5Identifica los factores de riesgo. Ciertas condiciones médicas y ambientales hacen que la deshidratación sea más probable, así que las mascotas que sufren de estas condiciones tienen mayor riesgo de deshidratarse. Esto significa que debes vigilar muy de cerca a las mascotas con estas condiciones en busca de los primeros síntomas de deshidratación. Los ejemplos de dichas condiciones incluyen insuficiencia renal, diabetes, hipertiroidismo, cardiopatía, enfermedad inflamatoria intestinal, parásitos gastrointestinales, diversas enfermedades infecciosas y golpe de calor.
Consejos
- Asegúrate de que los gatos siempre tengan acceso a mucha agua fresca y limpia.
- Alimenta a tu gato por lo menos un poco de comida fresca o enlatada ya que la comida seca no provee suficiente humedad.[17]
Referencias
- ↑ Helio A. de Morias, Dennis J. Chew, Catherine W. Cohn y Stephen P. DiBartola, "Disorders of Fluid Balance, Fluid Therapy and Transfusion Therapy." In Quick Reference to Veterinary Medicine, Editado por William R. Fenner. Filadelfia: Lippincott Williams & Wilkins, 2000
- ↑ Helio A. de Morias, Dennis J. Chew, Catherine W. Cohn y Stephen P. DiBartola, "Disorders of Fluid Balance, Fluid Therapy and Transfusion Therapy." In Quick Reference to Veterinary Medicine, Editado por William R. Fenner. Filadelfia: Lippincott Williams & Wilkins, 2000
- ↑ http://www.merckvetmanual.com/mvm/emergency_medicine_and_critical_care/fluid_therapy/the_fluid_resuscitation_plan.html
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- ↑ Victoria Aspinall y Richard Aspinall. Clinical Procedures in Small Animal Veterinary Practice. Gloucester, Gran Bretaña: 2013.
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- ↑ http://www.veterinarypartner.com/Content.plx?P=A&A=292&S=0&EVetID=0
- ↑ Victoria Aspinall y Richard Aspinall. Clinical Procedures in Small Animal Veterinary Practice. Gloucester, Gran Bretaña: 2013.
- ↑ https://www.vetlearn.com/_preview?_cms.fe.previewId=308c2f60-d966-11e0-9094-0050568d3693
- ↑ Victoria Aspinall y Richard Aspinall. Clinical Procedures in Small Animal Veterinary Practice. Gloucester, Gran Bretaña: 2013.
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- ↑ Victoria Aspinall y Richard Aspinall. Clinical Procedures in Small Animal Veterinary Practice. Gloucester, Gran Bretaña: 2013.
- ↑ Victoria Aspinall y Richard Aspinall. Clinical Procedures in Small Animal Veterinary Practice. Gloucester, UK: 2013.
- ↑ Victoria Aspinall y Richard Aspinall. Clinical Procedures in Small Animal Veterinary Practice. Gloucester, Gran Bretaña: 2013.
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- ↑ Helio A. de Morias, Dennis J. Chew, Catherine W. Cohn y Stephen P. DiBartola, "Disorders of Fluid Balance, Fluid Therapy and Transfusion Therapy." In Quick Reference to Veterinary Medicine, Editado por William R. Fenner. Filadelfia: Lippincott Williams & Wilkins, 2000
- ↑ http://www.veterinarypartner.com/Content.plx?A=3041