Cómo secar un iPhone que se ha caído al agua

Si dejaste caer tu iPhone en el fregadero o la piscina, sabes el pánico inmediato que se produce. Salvar un celular mojado puede ser impredecible, pero hay algunos trucos que pueden ser de utilidad. Con suerte, podrás secar tu teléfono y hacer que vuelva a funcionar.

Parte 1

Parte 1 de 2:
Saber qué hacer inmediatamente

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Saca el teléfono del agua. Si bien este paso es lógico, puedes comenzar a entrar en pánico tan pronto como se te cayó en el agua. Tranquilízate y sácalo del agua tan rápido como sea posible.^{[1]
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Desconéctalo. Si el teléfono estaba enchufado. Asegúrate de desenchufarlo lo más pronto posible. Ten cuidado cuando lo hagas para evitar electrocutarte.^{[2]
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- Esto significa que debes asegurarte de no acercar los dedos a la conexión. Sostén el teléfono con una mano y jala el cargador sujetándolo por el cable a varios centímetros de distancia. Normalmente, no debes jalarlo así porque puedes desgastar el cable, pero en este caso deberás hacer para evitar electrocutarte.
3
Apaga el teléfono. Lo ideal sería retirar primero la batería. Como no puedes hacer eso en un iPhone, lo siguiente mejor es apagar el dispositivo tan pronto como sea posible.^{[3]
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Quítale la tarjeta SIM. Para hacerlo, necesitas un clip de papel o la herramienta específica para retirar la SIM.^{[4]
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- Ubica la bandeja para la tarjeta SIM en tu iPhone. Por lo general, se encuentra en el lado derecho del teléfono. Observarás un agujero pequeño.^{[5]
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- Introduce el clip o la herramienta en el agujero. La bandeja para la tarjeta SIM saldrá. Por ahora, déjala afuera.^{[6]
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Limpia el teléfono con una toalla. Pásale una toalla al dispositivo para secar la parte exterior lo más rápido posible.^{[7]
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- También puedes pasar la toalla por los puertos para así extraer el agua.

Parte 2

Parte 2 de 2:
Tomar medidas adicionales

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Quita el agua de los puertos. Intenta sacudirle el agua.^{[8]
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Fuente de investigación} También puedes soplar el agua cuidadosamente aplicando aire comprimido. No obstante, evita soplar directamente el interior de este, así que ten cuidado.^{[9]
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- Para utilizar aire comprimido, sostén la lata de aire de modo tal que sople a lo largo del agujero en lugar de hacerlo directamente hacia el interior de este. Rocía el aire y el agua deberá salir por el otro lado.
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Usa un tipo de elemento desecante. Algunas personas utilizan arroz para secar un teléfono, pero no es la opción más efectiva. El arroz instantáneo es un poco mejor, pero también puede quedarse atorado en los puertos.^{[10]
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Fuente de investigación} Una mejor alternativa es utilizar gel de sílice, el cual viene en pequeños paquetes junto con muchos artículos electrónicos y absorbe el agua mejor que el arroz. Puedes reunir los suficientes paquetes o comprarlos en una tienda de artesanías. Necesitarás la cantidad suficiente como para rodear el teléfono.^{[11]
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Fuente de investigación} Una última opción es usar una bolsa de secado, la cual está específica diseñada para este propósito y que puedes encontrar en línea o en las tiendas de electrónica.^{[12]
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- Si no puedes encontrar la cantidad suficiente de paquetes de gel de sílice, puedes probar con arena para gatos cristalizada, que es básicamente lo mismo.^{[13]
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- Algunas pruebas muestran que podría ser mejor dejar el teléfono al aire libre en lugar de sumergirlo en un agente desecante.^{[14]
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Sumerge el teléfono. Si vas a utilizar arroz, protege tu teléfono de este envolviéndolo en una toalla de papel antes de sumergirlo.^{[15]
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Fuente de investigación} Introdúcelo en un tazón de arroz. En el caso de los paquetes con gel de sílice, rodéalo con tantos como tengas.^{[16]
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Fuente de investigación} Si usas una bolsa desecante, simplemente deja caer el teléfono en ella y séllala.^{[17]
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Déjalo secar. Pon el teléfono a secar durante al menos dos días.^{[18]
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Fuente de investigación} Asegúrate de que los componentes internos estén totalmente secos. De lo contrario, podrías ocasionar un cortocircuito al encenderlo.
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Vuelve a colocar la tarjeta SIM. Vuelve a introducir la bandeja de la tarjeta SIM asegurándote de que ingrese de la misma manera en que la sacaste.
6
Enciende el teléfono. Una vez que el teléfono se haya secado por completo, puedes volver a encenderlo. Si tienes suerte, funcionará y podrás seguir usándolo.^{[19]
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Consejos

Si el teléfono estuvo sumergido en agua por más de 20 minutos, lo más probable es que no funcione.
Si es posible, solicita con anticipación un kit para secar un teléfono y tenlo a la mano en caso de que lo necesites.
Usa un estuche a prueba de agua para proteger tu teléfono de este tipo de situaciones.

Advertencias

No utilices una secadora de pelo u otra fuente de calor para secar tu teléfono, ya que el calor puede dañarlo aún más.^{[20]
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Si bien los teléfonos se secan mejor cuando los abres, esto anulará la garantía. Además, si no sabes lo que haces, puedes dañarlo más al abrirlo.^{[21]
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Fuente de investigación} No obstante, el daño por agua invalida la garantía en la mayoría de los casos, por lo que este problema podría no ser una preocupación para ti.^{[22]
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Incluso si logras que tu teléfono funcione, el agua puede provocar un daño permanente en él, sobre todo en la batería. Podría formarse una cavidad en algunos meses o incluso sobrecalentarse.^{[23]
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