Cómo hacer café

Existen muchas formas de preparar café, aunque hay algunos cuantos trucos que puedes emplear para hacer una taza de café realmente buena. Si no tienes una cafetera, no te preocupes, ¡pues aún puedes disfrutar de un buen café colocando un goteador de café sobre una taza, utilizando una prensa francesa o incluso un paño de cocina!.

Método 1
Método 1 de 6:
Utilizar una cafetera

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    Agrega agua filtrada o embotellada en un recipiente. Necesitarás aproximadamente 180 ml (6 oz) por cada taza de café. Puedes medirla usando una garrafa o una taza medidora.[1] Si el recipiente de preparación tiene líneas marcadoras, básate en ellas. Algunos recipientes requieren un poco más de agua para compensar la que se pierde a causa de la evaporación.
    • Utiliza agua filtrada o embotellada en lugar de agua de grifo, destilada o suavizada.
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    Si es necesario, coloca un filtro de papel en el recipiente. Abre el compartimiento del filtro y echa un vistazo al interior. Algunas cafeteras incluyen una cesta con un filtro de malla, la cual puede servir como un filtro de papel. Si la cafetera no tiene dicha cesta, introduce el filtro.
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    Agrega los granos de café en el filtro. Necesitarás una cucharada (7 g) de café molido por cada taza. Si prefieres un café más fuerte, utiliza dos cucharadas (14 g).[2]
    • Puedes utilizar granos finos, medianos o gruesos según tu preferencia.
    • Para lograr un café de mejor sabor, muele los granos de café enteros y úsalos.
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    Prepara el café. Vuelve a colocar el filtro en su lugar o cierra la tapa (dependiendo del diseño de la cafetera). Enciende la cafetera y espera a que termine de hacer el café. El tiempo que tarde dependerá de la cantidad de agua que pongas en el recipiente. En la mayoría de los casos, tardará unos 5 minutos.
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    Apaga la cafetera y retira el filtro. Algunas cafeteras se apagan automáticamente mientras que otras no. Si tu cafetera no es automática, deberás apagarla después de que termine de filtrar el café. Una vez que la cafetera se haya apagado, retira el filtro y desecha los granos.
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    Retira el recipiente y sirve el café. Puedes servir el café tal como esté, endulzarlo con leche o agregarle crema. Para darle un dulzor aún mayor, agrégale azúcar, jarabe de maple u otro endulzante. Ahora disfrútalo de inmediato.

Método 2
Método 2 de 6:
Utilizar una taza y un goteador de café

  1. Imagen titulada Hario
    1
    Coloca un goteador de café encima de una taza. Un goteador de café es similar a un cono invertido encima de un platillo y su función es actuar de manera similar a la cesta filtradora de una cafetera.
    • Puedes utilizar este mismo método para preparar café con una cafetera Chemex. Solo coloca un filtro de café en la parte superior y luego procede con los pasos respectivos.
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    Introduce un filtro de papel en el goteador de café. Utiliza uno del mismo tipo que pondrías en una cafetera. Puedes usar el de forma de sobre o de taza.
    • Considera la posibilidad de pasar agua caliente por el filtro y luego deséchala. De esta manera, eliminarás el sabor de papel.
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    Añade el café en el filtro. Necesitarás de una a dos cucharadas (de 7 a 14 g) de café molido. Puedes utilizar uno premolido, pero obtendrás un sabor mucho mejor si optas por granos de café recién molidos.
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    Calienta agua hasta una temperatura apenas por debajo de la ebullición. Si tienes problemas para determinar la temperatura adecuada, hiérvela por completo, retírala de la hornilla y luego deja que se enfríe por unos 10 minutos.[3]
  5. 5
    Vierte suficiente agua en el filtro para saturar el café molido. Espera unos treinta segundos hasta que el agua se absorba y se empiece a formar espuma.[4]
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    Añade el resto del agua. Utiliza aproximadamente 180 ml (6 oz) de agua. Para evitar que se desborde, vierte unos 2,5 cm (1 pulgada) a la vez, deja que se drene a través del filtro y continúa.[5]
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    Retira el goteador y sirve el café. Una vez que la taza esté llena, retira el goteador y deséchalo junto con los granos de café molidos. Agrega un poco de crema y azúcar, y sírvelo de inmediato.

Método 3
Método 3 de 6:
Utilizar una prensa francesa

  1. 1
    Llena la prensa francesa con granos de café molidos medianos. Primero saca la tapa y el émbolo, y luego añade el café. Para cada taza, necesitarás dos cucharadas (14 g) de café molido.[6]
    • No utilices café molido grueso o se quedará atrapado en la malla. Tampoco utilices granos molidos finos, ya que la atravesarán.
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    Calienta agua hasta una temperatura apenas por debajo de la ebullición. También puedes hervirla por completo y luego dejar que se enfríe por unos 10 segundos.
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    Vierte el agua en la prensa francesa. Para cada taza de café, necesitarás unos 240 ml (8 oz). Luego, remueve el agua para mezclar el café.[7]
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    Introduce el émbolo y aplica presión. Presiónalo lo suficiente para que la malla quede justo por encima del nivel del agua. Evita presionarlo hasta el fondo.[8]
  5. Imagen titulada I like Coffee in the Mornings
    5
    Espera de tres a cuatro minutos y luego presiona el émbolo el resto del camino. Sujeta firmemente con una mano la prensa francesa mientras usas la otra para presionar el émbolo. Hazlo lentamente hasta que llegues hasta el fondo.[9]
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    Vierte en café en una taza y sírvelo. Si deseas, puedes agregarle un poco de leche y azúcar para darle sabor. Al terminar, asegúrate de limpiar la prensa francesa con agua y un detergente suave.

Método 4
Método 4 de 6:
Utilizar un percolador

  1. 1
    Llena la cámara inferior del percolador con agua caliente. Si aún no lo has hecho, retira la cámara superior y la cesta del filtro. Calienta un poco de agua y luego viértela en la cámara inferior hasta que llegue justo debajo de la válvula de vapor.[10]
    • A un percolador también se le conoce como “cafetera moka” o “cafetera italiana”
    • Si quieres obtener mejores resultados, utiliza agua filtrada o embotellada.
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    Agrega la cesta de filtro y luego llénalo con café molido grueso. Presiona el café. La cantidad que uses dependerá de la capacidad del percolador. En la mayoría de los casos, tendrás una línea de marcación, pero si no es así, utiliza de una a dos cucharadas (7 a 14 g) de café por cada 180 ml (6 oz) de agua.[11]
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    Vuelve a colocar la cámara superior. Sostén firmemente el percolador con una mano y luego vuelve a colocar la cámara superior. Es probable que el percolador ya esté caliente a causa del agua, así que quizás sea buena idea sujetarlo con unos guanes para horno o una agarradera.
  4. Imagen titulada Moka Pot
    4
    Calienta el percolador en la estufa a una temperatura media. Colócalo en la hornilla y enciéndela a fuego medio para hacer que el agua se caliente. No le pongas la tapa para que así pueda observar la preparación y retirarlo del fuego cuando sea necesario.[12]
    • Asegúrate de que el mango del percolador no esté directamente sobre la fuente de calor, ya sea una llama a gas o un dispositivo eléctrico.
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    Una vez que termines de preparar el café, retira el percolador de la fuente de calor. A medida que el agua hierva, el café comenzará a llenar la sección superior. Conforme progrese la preparación del café, este comenzará a oscurecerse y luego a aclararse. Cuando el flujo de café se torne de un color pálido o rubio, significa que ya está listo. Este proceso solo debe tardar unos 5 minutos.
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    Vuelve a colocar la tapa y vierte el café en una taza. Una vez que la cámara superior se eleve, utiliza unos guantes para horno o una agarradera para volver a colocar la tapa. Levanta el percolador por el mango y vierte el café. Si deseas, agrega crema o azúcar y sirve de inmediato.
    • Ten en cuenta que el recipiente estará caliente, ¡así que manipúlalo con cuidado!

Método 5
Método 5 de 6:
Preparar café sin usar una cafetera

  1. 1
    Coloca un paño de cocina encima de una taza. Luego, con una mano, introduce el paño en ella para crear un bolsillo de 7,5 a 10 cm (3 a 4 pulgadas) de profundidad.[13]
    • También puedes usar un pañuelo, una servilleta, tela de algodón o muselina, pero asegúrate de que esté limpia.
    • Si quieres hacer una mayor cantidad, coloca el paño de cocina sobre un frasco.[14]
    • Si la tela es suelta, dóblala hasta formar un cuadrado.[15]
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    Fija el paño de cocina al borde de la taza. Para ello, puedes usar broches aprietapapeles, sujetapapeles o pinzas para ropa. Necesitarás al menos dos para cada lado, pero cuatro brindarán una mayor fijación.
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    Agrega granos de café molidos medianos Agrega granos de café molidos a nivel intermedio en el paño de cocina. Los granos de café recién molidos son los más adecuados, pero también puedes usar unos premolidos en caso de que no tengas nada más. Por cada taza, necesitarás de una a dos cucharadas (7 a 14 g).
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    Calienta un poco de agua. Sería mejor si calientas el agua hasta una temperatura de entre 91 y 97 °C (195 y 205 °F). Si no es posible hacerlo, hierve agua y luego déjala enfríar por unos 30 segundos.[16]
  5. 5
    Añade el agua gradualmente en el paño de cocina. Vierte la suficiente agua como para cubrir el café molido. Espera unos 30 segundos y añade la mitad del agua. Luego espera nuevamente este tiempo y añade el resto en cuatro partes.[17]
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    Espera a que el agua se drene y luego sirve el café. Después de que toda el agua se haya drenado (lo que tarda aproximadamente 2 minutos), retira el paño de cocina de la taza. Si deseas, agrega crema y azúcar, y sirve de inmediato.[18]

Método 6
Método 6 de 6:
Asegurarte de obtener el mejor sabor posible

  1. 1
    Compra granos de café de buena calidad recién tostados. El café arábica tendrá una mucho mayor calidad que el café robusta.[19] Puedes comprar café premolido, pero sería mucho mejor si mueles los granos de café por tu cuenta antes de utilizarlos. Esto se debe a que el café molido pierde su frescura aún más rápido que los granos enteros.
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    Almacena los granos de la manera adecuada y úsalos en el periodo de una semana. Mantenlos a una temperatura ambiente en un recipiente hermético, de preferencia en uno de vidrio o cerámica. No los almacenes en el refrigerador o congelador, ya que eso causará que el café absorba la humedad y los malos olores.[20]
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    Utiliza un filtro de buena calidad. Los filtros de papel blanqueados con oxígeno o libres de dioxinas funcionan bien. No obstante, también puedes utilizar uno duradero o chapado en oro. Evita usar uno barato, ya que afectará el sabor del café.[21]
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    Utiliza agua filtrada o embotellada. Evita usar agua del grifo, a menos que sepas que tu ciudad proporcione agua de buena calidad. Si vas a usar agua del grifo, déjala correr por unos cuantos segundos antes de llenar el recipiente. Asegúrate de que esté fría.[22]
    • Nunca utilices agua destilada o suavizada, ya que eso le dará mal sabor al café.
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    Asegúrate de que el agua esté lo suficientemente caliente. La temperatura del agua debe encontrarse entre 91 y 97 °C (195 y 205 °F). Ten en cuenta que una temperatura muy caliente o muy fría le dará mal sabor al café.[23]
    • Si no utilizarás una cafetera, primero hierve el agua y luego deja que se enfríe por un minuto antes de añadirla a los granos.
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    Sirve el café tan pronto como termines de prepararlo. Mientras más tiempo esperes, menor será su sabor. Si lo almacenas en un termo, asegúrate de beberlo en un periodo de una hora.[24]
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    Siempre mantén limpia la cafetera. Utiliza agua caliente para enjuagar el recipiente y la cesta de filtro, luego sécalos con un paño limpio y vuelve a ensamblarlos. De esta manera, evitarás que los granos y el cafeol (aceite de café), lo que puede darle un sabor amargo a las futuras tazas de café.[25]
    • Limpia la cafetera una vez al mes utilizando vinagre y enjuágala bien.[26]

Vídeo
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Consejos

  • El sabor del café dependerá de muchos factores, entre los que se encuentran el lugar donde se cultivaron los granos; la elevación en la que crecieron; la variedad del árbol de café y la manera en que estos se procesaron, secaron y tostaron.
  • Pregúntale al barista qué sabor de café te recomendaría y realiza anotaciones. Su respuesta podría variar desde “Kona de Hawái”, “Etíope” hasta “una lata de Maxwell House instantánea”.
  • Siempre que sea posible, compra granos donde un tostador local y muélelos en casa. De esta manera, te asegurarás de tener el café más fresco y con mejor sabor.
  • Si te encanta lo dulce, coloca un poco de chocolate o azúcar para darle un mayor dulzor al café.
  • Pasa el agua a través del filtro (sin el café en él). Esto eliminará los residuos de las tandas anteriores que puedan dar un sabor amargo.
  • Endulza el café añadiendo un poco de leche o café.
  • Los granos de café pueden tornarse rancios rápidamente si no los almacenas en un recipiente hermético. Existen algunos recipientes de almacenamiento sellados al vacío que puedes encontrar en Internet específicamente para café.

Cosas que necesitarás

Utilizar una cafetera

  • cafetera
  • granos de café enteros o molidos
  • molinillo de café (si vas a moler los granos enteros)
  • filtro para café
  • agua filtrada o embotellada

Utilizar una taza y un goteador de café

  • goteador de café
  • taza
  • granos de café enteros o molidos
  • molinillo de café (si vas a moler los granos enteros)
  • filtro de café
  • agua filtrada o embotellada

Utilizar una prensa francesa

  • prensa francesa
  • café molido mediano
  • agua filtrada o embotellada

Utilizar un percolador

  • percolador
  • café molido grueso
  • filtro de café
  • agua filtrada o embotellada

Preparar café sin usar una cafetera

  • taza
  • paño de cocina
  • pinzas para ropa o broches aprietapapeles
  • granos de café enteros o molidos
  • molinillo de café (si vas a moler los granos enteros)
  • agua filtrada o embotellada

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Referencias

  1. ↑ https://www.folgerscoffee.com/coffee-how-to/how-to-videos/how-to-make-coffee
  2. ↑ https://www.folgerscoffee.com/coffee-how-to/how-to-videos/how-to-make-coffee
  3. ↑ https://www.realsimple.com/food-recipes/cooking-tips-techniques/how-make-coffee
  4. ↑ https://www.realsimple.com/food-recipes/cooking-tips-techniques/how-make-coffee
  5. ↑ https://www.realsimple.com/food-recipes/cooking-tips-techniques/how-make-coffee
  6. ↑ https://www.gocoffeego.com/professor-peaberry/brewing-tips/how-to-make-coffee
  7. ↑ https://www.gocoffeego.com/professor-peaberry/brewing-tips/how-to-make-coffee
  8. ↑ http://www.illy.com/wps/wcm/connect/en/coffee/how-prepare-french-press-coffee
  9. ↑ http://www.illy.com/wps/wcm/connect/en/coffee/how-prepare-french-press-coffee
  1. ↑ http://www.jamieoliver.com/news-and-features/features/how-to-make-the-perfect-cup-of-coffee/
  2. ↑ http://www.jamieoliver.com/news-and-features/features/how-to-make-the-perfect-cup-of-coffee/
  3. ↑ http://www.jamieoliver.com/news-and-features/features/how-to-make-the-perfect-cup-of-coffee/
  4. ↑ https://www.littlecoffeeplace.com/make-coffee-without-a-coffee-maker
  5. ↑ https://www.littlecoffeeplace.com/make-coffee-without-a-coffee-maker
  6. ↑ http://www.artofmanliness.com/2015/06/18/how-to-brew-coffee-without-a-coffee-maker/
  7. ↑ http://www.artofmanliness.com/2015/06/18/how-to-brew-coffee-without-a-coffee-maker/
  8. ↑ http://www.artofmanliness.com/2015/06/18/how-to-brew-coffee-without-a-coffee-maker/
  9. ↑ http://www.artofmanliness.com/2015/06/18/how-to-brew-coffee-without-a-coffee-maker/
  10. ↑ http://www.eatingwell.com/article/41595/9-rules-for-how-to-make-a-perfect-cup-of-coffee/
  11. ↑ http://www.eatingwell.com/article/41595/9-rules-for-how-to-make-a-perfect-cup-of-coffee/
  12. ↑ http://www.eatingwell.com/article/41595/9-rules-for-how-to-make-a-perfect-cup-of-coffee/
  13. ↑ http://www.ncausa.org/About-Coffee/How-to-Brew-Coffee
  14. ↑ http://www.ncausa.org/About-Coffee/How-to-Brew-Coffee
  15. ↑ http://www.ncausa.org/About-Coffee/How-to-Brew-Coffee
  16. ↑ http://www.ncausa.org/About-Coffee/How-to-Brew-Coffee
  17. ↑ http://www.eatingwell.com/article/41595/9-rules-for-how-to-make-a-perfect-cup-of-coffee/

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Categorías: Café
Resumen del artículoX

Para hacer café, primero determina el método que quieres utilizar. Unas cuantas opciones son utilizar una cafetera convencional, una prensa francesa o un gotero de café. Si quieres usar una cafetera, primero rellena el depósito con agua. Utiliza aproximadamente 180 mililitros (o 6 onzas) de agua por cada taza de café que quieras preparar. Luego coloca un filtro en la canasta ubicada debajo de la tapa de la cafetera. Agrega de 1 a 2 cucharadas de granos de café por taza en el filtro. Luego, cierra la tapa y enciende la cafetera. ¡Vierte el café y disfrútalo! Si quieres usar una prensa francesa, primero calienta el doble de la cantidad de agua que el café que planeas usar. Mientras el agua se calienta, mide de 2 a 3 cucharadas de granos de café en la prensa. Una vez que el agua esté casi hirviendo, retírala del fuego. Vierte suficiente agua caliente en la prensa para saturar los granos por completo. Revuelve la mezcla con suavidad. Deja que el café se asiente durante unos 30 segundos. Luego, rellena la prensa con agua y deja reposar el café por unos 4 minutos más. Por último, coloca la tapa en la prensa y presiona lentamente el émbolo hasta que llegue hasta el fondo. ¡Sirve el café y disfrútalo! Si quieres utilizar un gotero, calienta aproximadamente 600 mililitros (o 20 onzas) de agua en una tetera. Posiciona el gotero sobre la taza y colócale un filtro. Cuando el agua esté casi hirviendo, humedece todo el filtro vertiendo parte del agua. Vacía el agua de la taza. A continuación, agrega de 2 a 3 cucharadas de granos de café en el filtro. Ahora, comienza a verter el agua sobre los granos de café, empezando desde el borde exterior del filtro y dirigiéndote hacia el centro en un patrón de espiral. Una vez que todos los granos estén húmedos, deja que el café “florezca” por aproximadamente 30 segundos. Luego, vierte lentamente el restante de agua sobre los granos, tomando pausas ocasiones para permitir que el café gotee en la taza ¡Sírvelo y disfruta!