Los liriopes, también conocidos como serpentinas, son plantas que se propagan y empiezan a crecer en la primavera de cada año.[1] Ya que los liriopes propagan sus raíces y crecen fuera del lugar donde fueron plantados originalmente, son perfectos para ser trasplantados. Desentierra trozos de planta, incluyendo raíces, y vuelve a plantarlos en zonas con sombra. Planta varias matas de liriope lo suficientemente separadas como para que puedan propagarse.

Parte 1
Parte 1 de 3:
Trabajar la zona de plantación

  1. 1
    Busca un lugar con filtración solar o que esté completamente bajo la sombra. Un liriope no necesita luz solar plena para crecer. Demasiado sol le hará daño. Plántalo cerca o debajo de un árbol o arbusto, o contra una casa o terraza. Escoge un lugar que esté más cerca de la sombra que del sol.[2]
  2. 2
    Deshazte de malas hierbas y maleza. Si hay muchas malas hierbas en la zona de plantación, arráncalas desde la raíz. De este modo, podrás hacer espacio para que el liriope se propague. En tanto arranques la mayor parte de maleza, el sistema de raíces será más quebradizo cuando remuevas la tierra.[3]
    • Está bien dejar plantas auténticas en la zona, ya que los liriopes crecen bien junto a otras plantas.
  3. 3
    Pica la tierra para aflojarla. Los liriopes necesitan una tierra que drene bien, así que debes remover la tierra compactada. Usa una pala, una azada o un motocultor para mezclar la tierra y aflojarla. Si la tierra está notoriamente seca, riégala antes y durante el proceso de removido.[4]
    • Si has labrado la zona hace poco, que no te preocupe volver a hacerlo.
  4. 4
    Añade compost o estiércol a la tierra. A medida que vayas picando la tierra para lograr un mejor drenaje, mezcla un poco de compost o estiércol de materia marrón en la tierra. No hay una proporción perfecta, pero el compost o el estiércol debe ser menos de la mitad de la mezcla.[5]

Parte 2
Parte 2 de 3:
Trasplantar plantas vivas

  1. 1
    Replanta el liriope a inicios de primavera, antes de los nuevos brotes. Esta planta se mantiene inactiva durante los meses de invierno, si vives en un lugar con inviernos fríos. Luego del último deshielo previo a la primavera, la planta deja de estar inactiva. Es justamente esta época la mejor para trasplantar.[6]
    • Si aún no tienes liriopes en crecimiento, planta semillas para empezar a cultivar liriopes.
  2. 2
    Desentierra una mata de liriope junto a sus raíces. Esta es una planta que se multiplica, así que crecen nuevos liriopes cuando replantas sus ramitas. La mata solo tiene que tener unos cuantos centímetros (casi 8) de ancho para producir un nuevo brote.[7]
    • Puedes comprar liriopes en un contenedor, en una tienda de jardinería. En este caso, lo único que tendrás que hacer es sacar con cuidado la planta del contenedor.
  3. 3
    Entierra las raíces de la planta. Usa las manos para cavar un hoyo en la tierra preparada. Este debe ser lo suficientemente grande como para que quepa el sistema de raíces del liriope. Coloca la planta en el hoyo y cubre bien el rededor, usando la tierra.
  4. 4
    Planta cada mata a unos 30 cm (1 pie) de distancia. Cada mata de liriope que plantes se propagará y se convertirá en otra planta. Cuando plantes varias matas en una fila o en el borde de otro huerto, deja espacio para que la planta se propague.
    • Ya que los liriopes se propagan mucho, suele ser buena idea plantarlos en algún lugar con límites definidos, de modo que no se salgan de control.
    • Tendrás que dividir el liriope cada 2 o 3 años para mantenerlo en su ubicación original.
  5. 5
    Riega el liriope recién plantado dos o tres veces por semana. Ya que plantaste en una zona sombreada, la tierra retiene más humedad en comparación a si estuviera en pleno sol. Aun así, el liriope trasplantado necesita un poco más de agua, para que eche raíces en la nueva tierra. No empapes el suelo, pero asegúrate de que se mantenga húmedo.

Parte 3
Parte 3 de 3:
Mantener el liriope

  1. 1
    Poda los liriopes a inicios de primavera. Los liriopes están inactivos durante el invierno, pero tienden a mantener la longitud con la que terminaron la temporada de crecimiento. Deberás podarlos en algún momento de febrero, antes de que aparezcan los nuevos brotes. Recuerda que podar un poco antes es mejor que dejar pasar demasiado tiempo.[8]
  2. 2
    Usa tijeras de podar para cortar los liriopes a 2,5 cm (1 pulgada) aproximadamente. Para las parcelas pequeñas de liriopes, las tijeras de podar son la mejor opción. Si son liriopes muy largos, de 30 cm (1 pie) o más, usa una desbrozadora, una recortadora de hierba o incluso un cortacésped para podar. Asegúrate de no cortarlos hasta el nivel del suelo.[9]
    • Ajusta la altura de podado a tu preferencia. El punto óptimo está entre 2,5 a 15 cm (1 a 6 pulgadas).
  3. 3
    Fertiliza la tierra una vez al año, después de podar el liriope. Los liriopes son resistentes, así que no necesitan mucho fertilizante. Si quieres estimular un crecimiento saludable a inicios del año, aplica un fertilizante 10-10-10, equilibrado y de larga duración, que esté formulado para liberarse lentamente. El fertilizante que necesitas estará etiquetado como "de liberación lenta".
  4. 4
    Riega el liriope con poca frecuencia. Otra ventaja de este tipo de planta es que no necesita un riego constante. Revisa el liriope una vez a la semana o cada ciertos días, y riega solo si parece que empieza a marchitarse o a ponerse marrón. Cuando decidas regarlo, dale mucha agua sin empapar la tierra.

Acerca de este wikiHow

Lauren Kurtz
Coescrito por:
Horticultora profesional
Este artículo fue coescrito por Lauren Kurtz. Lauren Kurtz es especialista en naturalismo y horticultura. Lauren ha trabajado para Aurora, Colorado administrando el jardín Water-Wise en el Centro Municipal de Aurora para el Departamento de Conservación del Agua. Recibió una licenciatura en estudios ambientales y de sostenibilidad en la universidad Western Michigan en 2014.