Cómo cultivar chiles

Coescrito por Andrew Carberry, MPH

Los chiles son parte de una gran variedad de pimientos de nombre Capsicum annum. Los cuales incluyen: Anaheim, ancho, cayenne, jalapeño, habanero y el chile banana. Los chiles pueden crecer en cualquier lugar, pero crecen mejor en ambientes soleados. Cuando cultives estas especies y las pruebes, te lamentarás de no haberlo hecho antes.

Parte 1

Parte 1 de 3:
Prepararte para plantar

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Elige una variedad de chiles. Los chiles son de las plantas más maravillosas para cultivar, ya que crecen en una gran variedad de colores, tamaños, sabores y niveles de picante. Pueden ser anuales (deben plantarse cada año) o perennes (pueden crecer por sí mismos). Existen tres tipos generales de chiles: dulces, picantes y ornamentales. Todos tienen un nivel de picante, pero los chiles dulces son los de menor nivel, los ornamentales son de colores y formas atractivas (pero pueden ser muy picantes) y los chiles picantes son utilizados principalmente por su picante intenso y sabor.
- Sus colores varían de verde, amarillo mantequilla, naranja melocotón y rojo vivo a color ciruela y matices oscuros. El color no tiene relación con su nivel de picante o sabor.
- Visita un vivero para encontrar variedades que puedan crecer en tu ambiente.
- Algunos chiles se utilizan en diferentes áreas del mundo para recetas especiales, por ejemplo, el chile serrano se utiliza en comidas mexicanas, mientras que el chile Calcutta en tipos de curry asiático.^{[1]
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  Fuente de investigación}
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Busca el mejor lugar para plantar. Los chiles crecen bien en el calor y son las plantas que crecen mejor en este tipo de áreas soleadas. Elige un lugar en tu jardín que reciba mucho sol o al menos durante la mayor parte del día. Si vives en un área desértica, podrías necesitar un lugar con un poco de sombra para que los chiles no se quemen por el sol. Si vives en un área muy lluviosa, busca un lugar que reciba mucho sol y que tenga un buen drenaje, pues mucha agua hará que los chiles se ahoguen y crezcan con menos frutos.
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Decide si iniciarás plantando dentro de tu casa. Si no vives en un área que sea tradicional para la plantación de chiles (cerca del ecuador), entonces puedes plantarlos dentro de tu casa en macetas durante el invierno y después puedes trasplantarlos al jardín en la primavera. Si bien puedes sembrar directamente las semillas en el suelo, las posibilidades de que crezcan mejor que las que primero se siembran en una maceta dentro de casa y que después se transplantan al jardín no son tan altas.
- Puedes cultivar chiles desde que son semillas o después de que ya han crecido en un vivero, pero tendrás una mayor variedad si los cultivas desde que son semillas.
- Empezar cuando ya son plántulas es fácil: solamente debes planificarlo al menos 6 semanas antes de trasplantar los chiles al exterior. Los chiles pueden trasplantarse al aire libre después de la última helada en tu área.
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Prepara tu suelo. El suelo del jardín puede necesitar un pequeño arreglo para poder producir los chiles más grandes, sanos y fuertes. Crecen mejor en un suelo con buen drenaje y muchos nutrientes. Por lo tanto, una mezcla de arena en tu suelo te ayudará a drenar de mejor forma el agua. Incorpora compost unas semanas o meses antes de plantarlos. Si tu tierra tiene un drenaje malo o promedio, podrás mejorarlo al agregar un poco de arena. Si el potasio aún no está presente en cantidades suficientes, notarás que el crecimiento es mejor si aumentas la cantidad de potasio en el suelo. Siempre mide tu suelo primero. Si tu suelo tiene muy poco potasio, luego ve a un vivero para elegir el fertilizante que tenga bastante potasio y poco nitrógeno (puede ser una mezcla de 0-20-0).^{[2]
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Fuente de investigación}
- Analiza el pH de tu suelo y determina así si necesitas hacer más ajustes: los chiles crecen mejor en un suelo con pH neutro o levemente ácido de 6,5 a 7.
- Entre más prepares tu suelo, mejores chiles cultivarás.
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Parte 2

Parte 2 de 3:
Plantar dentro de casa

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Prepara las semillas. Para ayudar a las semillas a darles un mejor revestimiento para que puedan penetrar el suelo, puedes usar un papel toalla húmedo y una bolsa plástica para ablandarlas. Coloca un papel toalla húmedo doblado en una bolsa plástica y luego coloca las semillas dentro del papel. Coloca la bolsa en un lugar cálido y seco (como una alacena de la cocina), y déjala allí por 2 a 5 días. Las semillas empezarán a brotar dentro de este periodo, y luego podrás plantarlas.^{[3]
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Fuente de investigación}
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Planta las semillas en contenedores pequeños. Puedes comprar bandejas para semillas para tus plántulas o utiliza macetas para cada una. Llena cada bandeja o contenedor con la tierra (ya preparada con fertilizante y compost). Coloca una semilla a 1 cm (½ pulgada) de la superficie en cada contenedor.
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Riega las semillas. Las semillas deben regarse a diario para que el suelo se mantenga húmedo todo el tiempo. Dales la mayor cantidad de agua al inicio y después una cucharilla diaria.
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Colócalas en un lugar con calor y luz del sol. Si ya has plantado semillas antes, es posible que tengas una lámpara para calentar. Estas son perfectas para agregar calor para ayudar a las plantas a crecer con mayor rapidez. Si no tienes una de estas, colócalas en un lugar que reciba bastante luz del sol, como una ventana con dirección al sur y que tenga mucho calor o también cerca de un radiador. Solo cuida que las semillas no estén muy calientes ni muy frías, ya que los dos extremos afectarán su crecimiento.
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Verifica que las semillas florezcan. Puede tomar de unos días a unas semanas para que florezcan por primera vez. Al principio saldrán un par de hojas, conocidas como "hojas de la semilla". Después de un tiempo, saldrán otro par de hojas. Estas se conocen como "hojas verdaderas" y es señal de que los chiles ya están listos para ser trasplantados. Puedes esperar a que sigan creciendo para que inicie el calor en el exterior o puedes plantarlos como estén en ese momento.^{[4]
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Fuente de investigación}
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Haz que tus plántulas sean más fuertes. Las semillas que crecen en interiores están acostumbradas a temperaturas constantes que no sufren muchas fluctuaciones. Cuando se plantan en el exterior, pueden experimentar condiciones más difíciles como variaciones de temperaturas, niveles de humedad y cambios de luz. Para que sean más fuertes, pon las macetas en el exterior por unas horas todos los días. Inicia con 2 horas al día por una semana y después agrega 1 hora a cada día adicional que se coloquen en el exterior hasta que puedan aguantar estar fuera por 24 horas. En este punto pueden plantarse en el exterior sin miedo a que les afecte.

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Parte 3

Parte 3 de 3:
Plantar tus chiles

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Plántalos en el momento correcto. Espera a plantarlos fuera hasta que pase la última helada de la primavera (esto ocurre normalmente entre marzo o abril, dependiendo del clima local). Plántalos en un día soleado al mediodía cuando no sea muy caluroso para evitar que los afecte el ambiente.
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Cava los agujeros. Los chiles deben plantarse individualmente para evitar que se amontonen, incluso si los siembras en el exterior desde un inicio. Cava agujeros pequeños un poco más grandes que el tamaño de las semillas o bola de raíces utilizando una pala de jardinería. Deben estar a 30 cm (1 pie) de distancia, pero dependiendo del tipo de chile ese espacio puede ser aún más grande. Infórmate sobre los chiles que plantarás para conocer los espacios adecuados para su crecimiento.
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Planta tus chiles. Cada planta o semilla debe ir en cada hoyo que cavaste. Reemplaza la tierra que se encuentra arriba de cada uno para que solo haya 6,5 mm (1/4 de pulgada) de tierra encima de la semilla o raíz. No apelmaces mucho la tierra cuando termines, ya que los chiles crecen mejor en tierra suelta con buen drenaje.
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Riega los chiles. Los chiles crecerán si el suelo está húmedo, pero no empapado. Después de plantarlos, dales un poco de agua extra para que se adapten a la trasplantación. Riégalos después a diario para que el suelo se mantenga húmedo. Si vas a cultivar chiles dulces, puedes hacer que crezcan aún más dulces si les das mayor cantidad de agua.
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Dale mantenimiento a las plantas. Tomará 1 mes o más antes de que los chiles florezcan, así que tendrás que darles mantenimiento durante todo ese tiempo. Saca toda la maleza que encuentres, ya que esta quitará espacio y nutrientes a tus chiles. Agrega compost y fertilizante con potasio al suelo cada mes para mantener los nutrientes del suelo elevados. También puedes agregar una capa de material de acolchado para encerrar la humedad y bloquear a la maleza.
- Según el tipo de los chiles que cultives, podrías tener que usar un enrejado. Por ejemplo, a los pimentones les va mejor con el apoyo de un enrejado.
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Cosecha tus chiles. El tiempo de cosecha varía dependiendo de la especie de chiles, pero generalmente puedes hacerlo cuando su tamaño es el correcto. Cambiarán de color, así que a menos que sepas de qué color deberían estar para cosecharlos, no confíes en este aspecto para utilizarlo como indicador de madurez. Si tienes duda de si un chile ya está maduro para cosecharlo, ¡pruébalo! Así sabrás si es necesario que siga creciendo o si ya está listo para utilizarlo en la cocina.^{[5]
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Fuente de investigación}
- Si lo que quieres es hacer chile en polvo o en hojuelas secas, déjalos que se encojan y se sequen en su rama antes de cosecharlos.
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Consejos

La temperatura ideal del suelo para cultivar chiles es 26 °C (80 °F).

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Advertencias

Dale a tus plantas bastante espacio para crecer, ya que las plantas de chile pueden crecer hasta 90cm (3 pies) de alto.
Usa guantes cuando estés cosechando los chiles, ya que puedes dañarte las manos.
No te toques los ojos cuando estés manipulando chiles.

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