Los bollos recién horneados no solo son una excelente opción para servir con toda una variedad de comidas, sino que son fáciles de preparar. Incorpora los ingredientes básicos de una receta de pan (levadura, harina, agua) y mézclalos hasta que tomen una consistencia homogénea. Forma bollos de igual tamaño con la masa y déjalos crecer antes de hornearlos. Después de 12 a 15 minutos de horneado tendrás unos bollos deliciosos listos para servir.

Ingredientes

  • 1 kg 200 g (5 tazas) de harina común
  • 7 g (1/4 oz) de levadura seca
  • 240 ml (1 taza) de leche
  • 180 ml (3/4 taza) de agua
  • 120 ml (1/2 taza) de aceite vegetal
  • 60 g (1/4 taza) de azúcar blanca
  • 4 g (1 cucharadita) de sal

Rinde 12 bollos

Parte 1
Parte 1 de 3:
Mezclar los ingredientes

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    Mezcla 500 g (2 tazas) de harina con 7 g (1/4 oz) de levadura seca en un tazón. Mide la harina y la levadura seca en un tazón mediano o grande. Incorpora ambos ingredientes con una cuchara.[1]
    • Asegúrate de usar solo 500 g (2 tazas) de harina en este punto y no las 5 tazas. El resto lo necesitarás más adelante.
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    Calienta la leche, el agua, el aceite, el azúcar y la sal en un tazón aparte. Busca un recipiente mediano apto para microondas y vierte 240 ml (1 taza) de leche, 180 ml (3/4 taza) de agua, 120 ml (1/2 taza) de aceite vegetal, 60 g (1/4 taza) de azúcar blanca y 4 g (1 cucharadita) de sal. Lleva el tazón al microondas y calienta los ingredientes a máxima potencia hasta que entibien. [2]
    • Si no sabes exactamente cuánto tiempo tardan en calentar los ingredientes, empieza con 20 segundos.
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    Añade los ingredientes tibios a la mezcla de harina. Una vez que los ingredientes hayan calentado lo suficiente, retira el tazón del microondas y viértelos cuidadosamente al tazón donde están la harina y la levadura. [3]
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    Bate toda la mezcla por 3 minutos hasta lograr una consistencia homogénea. Mezcla los ingredientes con una cuchara de mango largo asegurándote de que se integren bien y de que no queden grumos muy grandes. Continúa batiendo por unos cuantos minutos hasta que la mezcla tome una consistencia homogénea. [4]
    • Si vas a usar una batidora en lugar de hacerlo a mano, pon mucha atención a la consistencia, ya que probablemente no sea necesario batir la mezcla durante los 3 minutos.
    • Empieza a usar la batidora a baja velocidad y utiliza un gancho amasador si es que tienes uno.
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    Incorpora de 500 a 700 g (de 2 a 3 tazas) de harina a la mezcla para obtener una masa suave. Para asegurarte de no añadir demasiada harina, empieza incorporando 240 g (1 taza) en el tazón donde están el resto de ingredientes. Combina bien toda la mezcla con una cuchara y agrega 1 taza más de harina hasta que empiece a ponerse suave. Si la masa continúa muy pegajosa agrega la última taza de harina e incorpora bien toda la mezcla. [5]
    • Ten cuidado de no agregar más de 3 tazas de harina a la mezcla, de lo contrario, es probable que tus bollos queden demasiado compactos.
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Parte 2
Parte 2 de 3:
Dar forma y hornear los bollos

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    Deja reposar la masa durante 10 minutos sobre una superficie plana espolvoreada con harina. Toma un puñado pequeño de harina y espolvoréalo sobre un espacio limpio de la encimera. Saca la masa del tazón, ponla sobre la parte de la encimera enharinada, luego cúbrela con un recipiente y déjala reposar por 10 minutos. [6]
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    Forma 12 bolas. Moldea 12 bolas de igual tamaño. Para que la masa no se te pegue en las manos échales un poco de harina. Presiona ligeramente la parte superior de cada bollo de tal forma que queden un poco aplanados. [7]
    • Antes de formar las bolas de masa lávate las manos con agua y jabón.
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    Colócalas en una placa para horno engrasada. Puedes engrasar la placa para horno con mantequilla o forrarla con una hoja de papel para horno. Acomoda las bolas en la placa dejando un espacio aproximado de 5 cm (2 pulgadas) entre una y otra.[8]
    • La masa va a crecer, por eso es fundamental dejar un pequeño espacio entre cada bola de masa.
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    Espera de 1 a 2 horas hasta que la masa duplique su tamaño. Antes de dejar crecer las bolas, asegúrate de fijarte en su tamaño de tal forma que puedas determinar el momento en que lo dupliquen. Evita tocarlas o moverlas mientras están en reposo.[9]
    • Deja crecer la masa a temperatura ambiente.
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    Hornéalas de 12 a 15 minutos a 200 °C (400 °F). Antes de llevar los bollos al horno, precaliéntalo al máximo. Una vez que las bolas de masa hayan crecido, deberás llevar la placa al horno de 12 a 15 minutos o hasta que la parte superior se dore ligeramente. [10]
    • Cuando ya estén horneados, podrás dejarlos enfriar por unos minutos en la misma placa antes de cortarlos por la mitad y servirlos.
    • Guarda los bollos que sobren en una bolsa de plástico con cierre hermético sacándole previamente todo el aire que sea posible.
    • A temperatura ambiente duran de 5 a 7 días. En su defecto, puedes congelarlos por varios meses. Asegúrate de usar una bolsa apta para congelador.
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Parte 3
Parte 3 de 3:
Modificar la receta al gusto

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    Unta mantequilla de miel sobre los bollos una vez que estén horneados. Ablanda una barra de mantequilla y mézclala con unas cuantas cucharadas de miel. Puedes añadir un poquito más de cada ingrediente hasta que tome el sabor que te gusta. Mezcla bien toda la preparación y úntala sobre la parte superior de los bollos horneados con un pincel de cocina de silicona.[11]
    • Esto le dará a los bollos un sabor más dulce.
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    Reemplaza la harina común por harina para pan si prefieres unos bollos más correosos. En lugar de usar 1 kg 200 g (5 tazas) de harina común, compra harina para pan para esta receta. Esto no solo hará que la masa quede menos pegajosa y sea más fácil de moldear, sino que los bollos tomarán una textura suave pero correosa.[12]
    • Utiliza las mismas cantidades del resto de ingredientes.
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    Agrega 1 o 2 huevos para mejorar el sabor. Si añades huevos, el líquido adicional hará que la masa quede más pegajosa, por lo que será necesario añadir también un poquito más de harina para equilibrar la receta. Los huevos le dan a los bollos un sabor delicioso, aunque después de horneados salen un poco más aplanados. [13]
    • Comienza agregando 120 g (1/2 taza) de harina aproximadamente.
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    Usa harina de trigo integral combinada con harina común como una opción más saludable. Evita reemplazar toda la cantidad de harina común, a menos que ya estés acostumbrado al sabor de la harina de trigo integral. En lugar de eso, si quieres preparar unos bollos deliciosos y saludables, sigue lo que indica la receta, pero utiliza 50 % de harina de trigo integral y 50 % de harina común.[14]
    • Por ejemplo, puedes utilizar 240 g (1 taza) de harina común y 240 g (1 taza) de harina integral de trigo e incorporarla con la levadura seca.
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Cosas que necesitarás

  • 2 tazones grandes
  • 1 recipiente mediano apto para microondas
  • cuchara
  • tazas medidoras
  • placa para horno
  • papel de horno (opcional)
  • cuchillo

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Categorías: Recetas | Panes
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