Hay algo sobre el glaseado de malvavisco que puede llevar a tu pastel o cupcake favorito al siguiente nivel. Tiene una pizca adicional de dulzura que hace que sea muy popular con los niños, aunque su textura ligera y esponjosa también le da una apariencia impresionante. Si quieres hacer glaseado de malvavisco en casa, puedes hacerlo fácilmente con algunas claras de huevo, azúcar, crémor tártaro y otros ingredientes simples. También puedes hacer una versión con pedazos de malvaviscos para darle sabor al glaseado, o improvisar una versión que use crema de malvaviscos para que tenga el sabor y la textura perfectos.

Ingredientes

Glaseado de malvavisco clásico

  • 1 taza (200 g) de azúcar granulada
  • 3 cucharadas (45 ml) de agua
  • 2 claras de huevo grandes (a temperatura ambiente)
  • ¼ de cucharadita de crémor tártaro
  • ¼ de cucharadita de sal
  • 1 cucharadita de vainilla

Glaseado de malvavisco con malvaviscos

  • 1 ¼ de taza (250 g) de azúcar
  • ½ taza de agua
  • 1 clara de huevo (batida hasta formar picos rígidos)
  • 18 malvaviscos grandes

Glaseado de malvavisco con crema de malvavisco

  • ¼ de taza (60 g) de mantequilla vegana ablandada
  • 200 g (7 oz) crema de malvavisco
  • 1 cucharadita de vainilla
  • 450 g (16 oz) de azúcar en polvo
  • 1 a 2 cucharadas de leche (divididas)

Parte 1
Parte 1 de 3:
Preparar glaseado de malvavisco clásico

  1. 1
    Hierve el azúcar y el agua. Combina 1 taza (200 g) de azúcar granulada con 3 cucharadas de agua en una cacerola pequeña. Calienta la mezcla a fuego medio alto hasta que hierva, lo cual debe tomar aproximadamente 3 minutos.[1]
  2. 2
    Cocina la mezcla hasta que el azúcar se disuelva. Una vez que la mezcla hierva, deja que continúe cocinándose hasta que el azúcar se disuelva por completo, lo cual podría tomar aproximadamente entre 2 y 3 minutos. Asegúrate de revolver la mezcla constantemente hasta que el azúcar se disuelva.[2]
    • Cuando el azúcar se disuelva, retira la sartén del fuego.
  3. 3
    Bate las claras de huevo con crémor tártaro, vainilla y sal. Echa 2 claras de huevo a temperatura ambiente, ¼ de cucharadita de crémor tártaro, ¼ de cucharadita de sal y 1 cucharadita de vainilla en el tazón de una batidora de mesa. Bate la mezcla a fuego medio alto hasta formar picos suaves, lo cual debe tomarte de 1 a 2 minutos.[3]
    • Para separar las claras de huevo de la yema, rompe el huevo contra una superficie plana, como una encimera. Separa el huevo en dos sobre un tazón dejando que la yema se caiga en la mitad inferior. Luego, muévela de un lado a otro de manera que la clara gotee en el tazón de abajo. Continúa moviendo la yema hasta quitar toda la clara.
    • Si lo prefieres, también puedes batir la mezcla de claras de huevo con un batidor eléctrico manual.
  4. 4
    Vierte el jarabe de azúcar en la mezcla de clara de huevo y bátela hasta que se vuelva esponjosa. Reduce la velocidad del batidor a media y vierte lentamente el jarabe de azúcar caliente en la mezcla de clara de huevo. Continúa batiendo la mezcla hasta que se enfríe y tenga una textura esponjosa, lo cual tomará aproximadamente 5 minutos.[4]
  5. 5
    Esparce el glaseado inmediatamente. Una vez que el glaseado alcance la consistencia adecuada, estará listo para esparcirlo. Es recomendable que lo uses inmediatamente, así que espárcelo sobre el pastel o los cupcakes tan pronto como termines de mezclarlo.[5]
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Parte 2
Parte 2 de 3:
Improvisar un glaseado de malvavisco con malvaviscos

  1. 1
    Hierve el azúcar y el agua. Echa 1 ¼ de taza (250 g) de azúcar y ½ taza (120 g) de agua en una cacerola pequeña. Luego, calienta la mezcla a fuego medio alto hasta que hierva, lo cual puede tardar entre 3 y 5 minutos.[6]
  2. 2
    Calienta la mezcla de azúcar hasta que alcance la etapa de bola suave. Coloca un termómetro para dulces en la cacerola mientras hierva para monitorear la temperatura de la mezcla. Luego, revuélvela con frecuencia hasta que el jarabe alcance los 110 °C (235 °F), lo cual tomará aproximadamente entre 5 y 7 minutos.[7]
    • Si no tienes un termómetro para dulces, sabrás que la mezcla habrá alcanzado la temperatura adecuada cuando dejes caer un poco de ella en el agua helada y se forme una bola suave.
  3. 3
    Rompe los malvaviscos en pedazos y añádelos al jarabe. Cuando el jarabe alcance la temperatura adecuada, retira la cacerola del fuego. Rompe 18 malvaviscos grandes en pedazos pequeños y déjalos caer en el jarabe caliente.[8]
  4. 4
    Deja que los malvaviscos reposen durante varios minutos. Una vez que hayas echado los pedazos de malvavisco al jarabe, no revuelvas la mezcla. Deja que los malvaviscos se asienten en el jarabe caliente durante 1 a 2 minutos, de manera que tengan tiempo para suavizarse y derretirse.[9]
  5. 5
    Vierte la mezcla de malvavisco sobre las claras de huevo. Después de que los malvaviscos se hayan suavizado y derretido en el jarabe, agrégalos lentamente a una clara de huevo batida hasta formar picos rígidos. Bate la mezcla a velocidad media alta con un batidor eléctrico manual para mezclar los dos ingredientes completamente.[10]
  6. 6
    Bate la mezcla hasta que alcance la consistencia adecuada. Continúa mezclando el glaseado a una velocidad media alta hasta que sea lo suficientemente espeso para esparcirlo fácilmente. Si se vuelve demasiado espeso, mezcla unas cuantas gotas de agua para diluirlo.[11]
  7. 7
    Alisa el glaseado sobre los cupcakes inmediatamente. El glaseado puede espesarse si no lo usas inmediatamente. Espárcelo sobre los cupcakes o el pastel tan pronto como termines de mezclarlo.[12]
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Parte 3
Parte 3 de 3:
Mezclar el glaseado de malvavisco con crema de malvavisco

  1. 1
    Combina la mantequilla, la crema de malvavisco y la vainilla. Echa ¼ de taza (60 g) de mantequilla suavizada, 200 g (7 oz) de crema de malvavisco y 1 cucharadita de vainilla en un tazón pequeño. Bate la mezcla a velocidad media con un batidor eléctrico hasta que se integre bien.[13]
    • Puedes mezclar el glaseado con una batidora de mesa si lo prefieres.
    • Puedes sustituir la mantequilla con margarina.
  2. 2
    Agrega el azúcar lentamente. Necesitarás 450 g (16 oz) de azúcar en polvo para el glaseado. Echa un poco a la vez y bate la mezcla a velocidad baja después de cada adición hasta que todo el azúcar se haya incorporado completamente.[14]
  3. 3
    Mezcla la leche. Una vez que hayas incorporado todo el azúcar, vierte 1 cucharada de leche dentro del tazón. Bate la mezcla hasta incorporar la leche completamente. Si el glaseado todavía no se puede esparcir, agrégale otra cucharada de leche y mézclalo nuevamente.[15]
  4. 4
    Esparce el glaseado sobre los productos horneados de tu elección. Cuando el glaseado alcance la consistencia adecuada, es recomendable que lo uses inmediatamente. Utiliza un cuchillo o una espátula angulada para esparcir el glaseado sobre los cupcakes o un pastel, y disfruta.[16]
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Consejos

  • El glaseado de malvaviscos es delicioso con chocolate, vainilla o incluso pastel de limón.
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Cosas que necesitarás

Glaseado de malvavisco clásico

  • cacerola grande
  • cuchara de madera
  • batidora de mesa
  • cuchillo para mantequilla o espátula angular

Glaseado de malvavisco con malvaviscos

  • cacerola grande
  • cuchara de madera
  • termómetro para dulces
  • batidor eléctrico manual
  • cuchillo para mantequilla o espátula angular

Glaseado de malvavisco con crema de malvavisco

  • tazón pequeño
  • batidor eléctrico manual
  • cuchillo para mantequilla o espátula angular

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Categorías: Horneado | Recetas
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