Un pan con la superficie crujiente y el centro gomoso, impregnado de los sabores de la grasa que suelta la carne, la mantequilla o la salsa en la cual lo cocieron es el pan frito ideal. Si lo haces de la forma adecuada, la preparación solo tardará unos minutos y la cocción, menos de 1 minuto. Fríe un huevo en el centro para obtener un desayuno delicioso o remoja el pan en una mezcla simple para hacer "pan frito a la francesa" (más conocido como tostadas francesas).

Tal vez estás buscando una receta de pan frito al estilo navajo.

Ingredientes

Pan frito o con huevo en canasta:

  • 1 rebanada de pan blanco (de preferencia, ligeramente duro)
  • 1 cucharada (15 ml) de aceite de cocina, mantequilla o grasa de tocino
  • 1 huevo (para el huevo en canasta)
  • Sal y pimienta

Tostadas francesas:

  • 8 rebanadas gruesas de pan (de preferencia, esponjosas y ligeramente duras)
  • 3 huevos grandes
  • ⅔ taza (160 ml) mitad y mitad de leche entera, crema o suero de leche
  • Una pizca de sal
  • 2 a 3 cucharadas (30 a 45 ml) de mantequilla

(Adicionalmente, para obtener tostadas francesas dulces)

  • 1 a 3 cucharadas (15 a 45 ml) de azúcar
  • 1 cucharadita (5 ml) de extracto de vainilla
  • 2 cucharaditas (10 ml) de canela, cáscara de naranja rallada u otro saborizante (opcional)

(Adicionalmente, para obtener tostadas francesas picantes)

  • 5 cucharaditas (20 ml) de salsa picante
  • 3 cucharadas (45 ml) de albahaca picada u otra hierba con sabor picante
  • Pimienta negra al gusto
  • 1 o más dientes de ajo, machacados o picados (opcional)
  • ¾ taza (180 ml) de queso parmesano (opcional)

Método 1
Método 1 de 3:
Freír pan para obtener un desayuno inglés

  1. 1
    Fríe la comida que acompaña al pan (opcional). El pan frito casi siempre se come con uno o más platos fritos, como parte de un desayuno inglés. Esto a menudo incluye huevos, tocino inglés, salchicha, rodajas de tomate, champiñones y frijoles horneados. Fríe todo en la misma sartén antes de empezar a preparar el pan frito.
    • Si vas a cocinar todos los alimentos mencionados anteriormente, empieza primero con la salchicha, continúa con los champiñones un par de minutos después, luego sigue con los demás ingredientes unos cuantos minutos después. Termina con los huevos fritos.
  2. 2
    Añade más grasa o aceite (opcional). Dependiendo de la cantidad de carne y mantequilla que usaste para freír los alimentos, es posible que ya tengas suficiente grasa en la sartén. Pero, seamos honestos: pensar en las calorías no tiene cabida al momento de freír el pan. Agrega una pizca de mantequilla, un chorrito de aceite vegetal con sabor o (si lo prefieres más tradicional) grasa de tocino o manteca.
  3. 3
    Calienta el aceite. Enciende la estufa a fuego medio alto hasta que el aceite brille y emita calor. Una sartén caliente mantendrá crujiente el pan, en vez de saturarlo de grasa.
  4. 4
    Agrega la rebanada de pan a la sartén. Lo ideal es el pan blanco ligeramente duro, ya que la rebanada seca absorberá el aceite con sabor más rápidamente. Reserva la hogaza fresca de granos enteros para las personas que prefieren las tostadas.
    • Corta el pan en triángulos si tu sartén es pequeña.
  5. 5
    Condiméntalo (opcional). Una pizca de sal y pimienta le añadirá más sabor, pero no es obligatorio. La pimienta de cayena es otra opción para las personas que disfrutan el picante en su desayuno.
  6. 6
    Cocínalo durante unos segundos o hasta que se dore bien. Si la sartén está lo suficientemente caliente y engrasada, solo necesitarás unos cuantos segundos para cada lado con el fin de obtener un pan crujiente, bien dorado y lleno de los sabores de la comida frita. Si tu sartén está muy fría y no crepitante, es posible que necesites freír el pan durante 15 a 30 segundos, pero sácalo antes de que se vuelva muy pastoso.

Método 2
Método 2 de 3:
Hacer el pan frito con huevo en canasta

  1. 1
    Haz un agujero en una rebanada de pan con un molde de galletas o un cuchillo. Puedes usar cualquier tipo de pan para este método, siempre y cuando puedas cortarlo sin que se desmorone. Corta un agujero en el centro del pan usando un molde de galletas o corta una forma usando un cuchillo. Puedes freír la forma cortada como un complemento o comerla mientras cocinas.
    • Usa un molde de galletas en forma de corazón para crear un desayuno romántico.
    • Si usas un cuchillo, coloca la rebanada de pan sobre la tabla de cortar y usa la punta del cuchillo con un movimiento de arriba abajo, perforando el pan con agujeros pequeños en vez de desgarrar el pan directamente.
  2. 2
    Calienta mantequilla o aceite a fuego medio bajo. Agrega una cantidad generosa de mantequilla o aceite de cocina a una sartén. Déjala calentar durante 1 o 2 minutos si usas una estufa eléctrica. Debe estar lo suficientemente caliente como para desprender un agradable chisporroteo al momento de colocar el pan.
    • No uses fuego alto o de lo contrario, el pan se quemará antes de que el huevo esté cocido.
  3. 3
    Coloca el pan en la sartén. Asegúrate de que la mantequilla o el aceite estén esparcidos de forma homogénea sobre la sartén, luego coloca la rebanada de pan. Pasa de inmediato al siguiente paso.
    • Si deseas, añade también la parte cortada del pan (si te quedó en un solo trozo).
  4. 4
    Rompe 1 huevo sobre el agujero. Echa el huevo directamente en el agujero del centro del pan, desde justo por encima de la sartén.
  5. 5
    Añade sal y pimienta al gusto. Si tienes invitados, en vez de ello puedes poner a su disposición dichos condimentos en la mesa del comedor.
    • Otra alternativa es cocinar al costado cualquier cosa que disfrutarías en un omelet. Prueba rallando un poco de queso cheddar y colócalo sobre la forma cortada del pan.
  6. 6
    Dale vuelta al pan una vez que la clara del huevo esté casi opaca. Puedes cocer el huevo al estilo que prefieras, sin embargo, el huevo estrellado es el más fácil de hacer ya que es menos probable que el pan se queme. Después de 1 o 2 minutos o hasta que la clara del huevo esté casi opaca (pero translúcida en algunas partes), voltea el huevo y el pan con una espátula o pinzas de cocina.
  7. 7
    Termina de freírlo y sírvelo. Cocina el otro lado del pan con un huevo en canasta durante 1 o 2 minutos más, hasta que la clara del huevo esté del todo cocida y firme y hasta que el pan esté dorado. Ahora que el huevo está más cocido, puedes desplazar el pan por la sartén con la espátula para absorber la mantequilla o el aceite.

Método 3
Método 3 de 3:
Cocinar tostadas francesas (pan frito en una mezcla de huevos)

  1. 1
    Corta el pan. El pan precortado normalmente es muy delgado y muy insípido para hacer una buena tostada francesa (a veces llamada pan rebozado con huevo o pan frito a la francesa). En vez de ello, corta una hogaza de pan jalá, pan de huevo, pan brioche o de yema (u otro pan de corteza fina y miga apretada) en rebanadas de 2 a 2,5 cm (¾ a 1 pulgada) de grosor.[1]
    • Lo ideal es dejar una hogaza fresca descubierta durante toda la noche para hacerla ligeramente seca y absorbente. Pero si esto no es factible, el pan fresco también queda bien.
    • El término "miga apretada" hace referencia al interior de la hogaza, el cual debe ser esponjoso y libre de agujeros grandes.
  2. 2
    Bate los huevos, los lácteos y la sal. Antes de empezar a freír, será necesario preparar una mezcla similar a una natilla espesa que envolverá el pan en una cubierta dorada. Para hacer suficiente mezcla para 8 rebanadas de tostadas francesas, bate los siguientes ingredientes:
    • 3 huevos grandes
    • Una pizca de sal
    • ⅔ taza (160 ml) mitad y mitad. Substituye la leche entera con una alternativa más saludable o crema para obtener un plato exquisito.[2] En vez de ello, usa suero de leche bien agitado para obtener un sabor adicional.[3]
    • Usa menos lácteos para el pan cortado finamente o de lo contrario, tu tostada francesa terminará pastosa.[4]
  3. 3
    Incorpora un saborizante a la mezcla. La tostada francesa puede ser un plato dulce o picante. Sazona tu mezcla como corresponde:
    • Para obtener tostadas dulces, incorpora 1 cucharada (15 ml) de azúcar y 1 cucharadita (5 ml) de extracto de vainilla. Si no planeas servir las tostadas con jarabe de arce u otra cobertura azucarada, puedes añadir 1 o 2 cucharadas (15 a 30 ml) adicionales de azúcar. Opcionalmente, añade 2 cucharaditas (10 ml) de canela y 2 cucharaditas (10 ml) de cáscara de naranja recién rallada.[5]
    • Para obtener tostadas picantes, incorpora 5 cucharaditas (20 ml) de salsa picante, 3 cucharadas (45 ml) de albahaca picada y una cantidad generosa de pimienta negra.[6] También puedes añadir queso parmesano, ajo y cualquier hierba picante o substituirlos por otros ingredientes.[7]
  4. 4
    Remoja el pan en la mezcla. Vierte la mezcla en una sartén ancha y coloca las rebanadas de pan para remojarlas. Muchos cocineros prefieren batir la mezcla con rapidez y solo remojar el pan brevemente mientras calientan la sartén con mantequilla. Sin embargo, remojar el pan durante 15 a 20 minutos, aumentará la cantidad de mezcla absorbida. Además, esto es recomendable si usas rebanadas de pan densas y gruesas.[8]
    • Dale la vuelta al pan una vez, a mitad del proceso de remojado.
  5. 5
    Calienta mantequilla en una sartén. Necesitarás cerca de 2 a 3 cucharadas (30 a 45 ml) de mantequilla en total, pero a menos que tengas una sartén que pueda contener 8 rebanadas de pan, probablemente las dividirás en tres o cuatro tandas. Derrite la mantequilla en la sartén y caliéntala hasta que empiece a hacer espuma y luego baje.
    • Puedes usar un aceite de cocina con sabor neutro como el aceite de canola o el aceite de maní, pero de este modo le restarás sabor al plato.
    • Una cantidad pequeña de aceite mezclado con la mantequilla evitará que esta se queme. Esto podría ser útil en una estufa eléctrica o en sartenes que calientan de manera irregular.
  6. 6
    Fríe el pan. Coloca la cantidad de pan que pueda entrar cómodamente en la sartén. Fríe hasta que quede bien dorado por un lado, luego dale vuelta y cocina el otro lado. Esto solo te tomará un par de minutos para cada lado.
    • Si aún te queda pan remojado para freír, quita de inmediato la mantequilla restante con una toalla de papel seca, luego derrite más mantequilla en la sartén antes de agregar las rebanadas restantes.
    • Si se esparce la mezcla, es una señal de que tu sartén no está lo suficientemente caliente o que hay demasiado líquido en tu mezcla.[9]
  7. 7
    Sirve las tostadas francesas. Puedes servir las tostadas francesas solas o con una variedad de coberturas. Prueba el jarabe de arce, las frutas frescas o el azúcar en polvo para obtener variedades dulces. Puedes comer las tostadas francesas picantes con salsa pesto, verduras salteadas o queso parmesano.

Cosas que necesitarás

  • Una sartén
  • Una espátula o pinzas de cocina

Consejos

  • Para hacer crutones, sigue la receta del desayuno inglés, pero usa aceite de oliva y mantequilla para evitar que se vuelvan rancios durante su almacenamiento. Corta el pan en cubos y mezcla los cubos con ajo y tus condimentos favoritos antes de freírlos.[10] (Otra opción es tostar el pan en el horno para obtener crutones menos aceitosos).

Acerca de este wikiHow

wikiHow es un "wiki", lo que significa que muchos de nuestros artículos están escritos por varios autores. Para crear este artículo, autores voluntarios han trabajado para editarlo y mejorarlo con el tiempo. Este artículo ha sido visto 26 187 veces.
Categorías: Panes | Recetas
Resumen del artículoX

Para hacer pan frito, primero vierte 510 gramos (4 tazas) de harina multipropósito en un tazón mediano. Luego, agrega 1/2 cucharadita de sal, 17 grams (1 cucharada) de polvo de hornear y 355 mililitros (1 y 1/2 tazas) de agua tibia. El agua debe estar aproximadamente a 45° Celsius (110° Fahrenheit). Amasa hasta que la masa esté suave, pero no tanto que esté pegajosa. Haz bolas de 8 centímetros (3 pulgadas) de ancho con la masa, y luego comprímelas para hacer discos de 1 centímetro (1/2 pulgada) de alto. Presiona un pequeño agujero en el centro de cada disco de masa aplanado. Por último, fríe los discos uno a la vez en 3 centímetros (1 pulgada) de manteca vegetal caliente. Voltea cada uno para asegurarte de que ambos lados estén dorados, y luego escúrrelos sobre papel de cocina. Sirve con los ingredientes que quieras, desde carne para tacos hasta queso. Si quieres ver más variaciones, como freír pan con un huevo en el centro, ¡sigue leyendo!