La proteína de suero es un producto del proceso de elaboración de queso. Después de preparar el queso, el líquido proveniente de la cuajada es el suero. El suero es beneficioso tal cual, pero puedes volverlo aún más deshidratándolo. Después de deshidratarlo, te quedarás con la proteína de suero.[1] Una vez que la tritures, puedes usarla en batidos, licuados, cupcakes y bollos.

Ingredientes

Proteína de suero desde cero[2]

  • 4 litros (1 galón) de leche
  • 5 cucharadas (75 mililitros) de zumo de limón o vinagre blanco

Proteína de suero del yogur[3]

  • 2 tazas (500 ml) de yogur o kéfir

Proteína de suero rápido[4]

  • 3 tazas (240 gramos) de leche en polvo, descremada, instantánea y dividida
  • 1 taza (80 gramos) de copos de avena normales o secos instantáneos
  • 1 taza (140 gramos) de almendras

Proteína saborizada en polvo[5]

  • 210 gramos (7 ½ onzas) de proteína en polvo
  • 3 paquetes de estevia en polvo
  • vainilla, canea o matcha en polvo

Método 1
Método 1 de 4:
Preparar proteína de suero desde cero

  1. 1
    Vierte la leche en una olla grande. Necesitarás 4 litros (1 galón) de leche. Para lograr mejores resultados, usa leche entera de vaca alimentada con pasto.
    • También puedes usar 4 tazas (950 mililitros) de leche y 2 tazas (475 mililitros) de crema.[6]
  2. 2
    Calienta la leche a 83 °C (180 °F). Puedes medir la temperatura metiendo un termómetro de cocina en la olla y luego pegándolo al costado. Si no tienes un termómetro, solo espera hasta que la leche empiece a hervir a fuego lento. 83 °C (180 °F) es la temperatura a la que la leche hierve a fuego lento.[7]
    • No dejes que el termómetro toque el fondo de la olla.
  3. 3
    Remueve 5 cucharadas (75 mililitros) de zumo de limón. Si no tienes nada de zumo de limón, puedes usar vinagre blanco: el sabor del producto final será casi idéntico. Esta receta también producirá requesón. Si deseas comer el queso, el vinagre blanco en realidad podría ser la mejor de las dos opciones.[8]
    • Si vas a usar leche y crema, agrega ½ cucharada (8,5 gramos) de sal y 3 cucharadas (45 mililitros) de zumo de limón o vinagre blanco.[9]
  4. 4
    Deja que la solución repose fuera del fuego por 20 minutos. Cubre la olla con una tapa bien ajustada. Sácala del fuego y colócala en algún lugar donde no te estorbe. Déjala ahí por 20 minutos.
  5. 5
    Transfiere la cuajada y el suero a un tazón con colador recubierto en la parte superior. Pon un colador grande en la parte superior de un tazón. Cubre el colador con un pedazo de estameña. Coloca la cuajada en el colador con una cuchara o cucharón. Vierte el resto del líquido en una jarra o frasco de vidrio grande y guárdalo en la refrigeradora.
  6. 6
    Deja que el suero se escurra por completo de la cuajada. Es mejor si colocas el tazón en la refrigeradora para seguir este paso. El suero podría demorarse por lo menos 2 horas en escurrirse y no querrás que la leche se descomponga.[10]
  7. 7
    Usa un deshidratador para procesar el suero, en caso de que tengas uno. Vierte el suero (tanto de la jarra como del tazón) en bandejas que vengan con un deshidratador: necesitarás más o menos 1 taza (240 mililitros) por bandeja. Procesa el suero según las instrucciones del deshidratador. Cada marca será diferente, pero para la mayoría de los deshidratadores, será 12 horas a 58 °C (135 °F).[11]
  8. 8
    Procesa el suero a mano si no tienes un deshidratador. Vierte todo el suero en una olla. Llévalo a punto de ebullición a fuego medio a alto y luego baja el fuego a una ebullición constante. Deja que se cocine hasta que se vuelva espeso y grumoso. Extiéndelo en una bandeja recubierta con papel pergamino o papel encerado y deja que se enfríe.[12] Divídelo en pedazos pequeños y después deja que se seque unas 24 horas.[13]
  9. 9
    Licúa el suero deshidratado hasta que se convierta en polvo. Puedes hacerlo con una licuadora o un procesador de alimentos. Incluso puedes usar un molinillo de café limpio, en caso de que tengas uno. Si sigues sintiendo el suero procesado a mano húmedo después de esto, tendrás que extenderlo de nuevo y dejar que se seque por otras 24 horas, y luego licuarlo una vez más.[14]
  10. 10
    Guarda la proteína en polvo en un recipiente con tapa. Un frasco funcionaría excelente para esto. Usa la proteína en polvo en batidos proteicos, cupcakes, panes, etc.

Método 2
Método 2 de 4:
Preparar proteína de suero del yogur

  1. 1
    Recubre un colador con estameña y deja que repose en un tazón. Asegúrate de usar una estameña sin blanquear en este paso. En vez de eso, puedes usar una toalla limpia. Asegúrate de que el tazón sea lo suficientemente profundo para el colador y 1 taza (240 mililitros) de líquido.
  2. 2
    Vierte el yogur o kéfir en el colador recubierto. Puedes usar yogur casero o de tienda. Si vas a usar yogur de tienda, asegúrate de que no contenga gelatina ni pectina.
    • Asegúrate de usar yogur o kéfir simple: no uses ningún tipo saborizado.
  3. 3
    Guarda el tazón en la refrigeradora y deja que el líquido del yogur se escurra. Puede demorarse hasta 24 horas. Si usaste yogur, se quedará una crema agria en el colador. También puedes dejar el tazón en la refrigeradora más tiempo: esto te dará más proteína y hará que el yogur se convierta en queso crema.[15]
  4. 4
    Vierte el suero obtenido en una jarra. Guarda el producto sólido que quede en la estameña. Dependiendo del tiempo que dejaste que el yogur o kéfir se escurra, te quedará yogur griego, crema agria o queso crema. En este punto, el suero estará completo. Tiene bastante proteína por sí solo, pero si quieres obtener aún más proteína, tendrás que deshidratarlo. La deshidratación concentrará el suero al sacarle el agua.
  5. 5
    Deshidrata el suero con un deshidratador, en caso de que tengas uno. Llena las bandejas que vienen con el deshidratador con 1 taza (240 mililitros) del suero líquido. Deshidrata el suero según las instrucciones del deshidratador. Para la mayoría de las máquinas y productos lácteos, esto será a 58 °C (135 °F). La deshidratación se completará en unas 12 horas.[16]
  6. 6
    Procesa el suero a mano si no tienes un deshidratador. Vierte todo el suero obtenido en una olla grande. Lleva el suero a punto de ebullición a fuego medio a alto y luego reduce el fuego a una ebullición constante. Deja que se cocine hasta que se convierta en un cuajado espeso y grumoso. Transfiérelo a una bandeja recubierta con papel pergamino o papel encerado y deja que se enfríe.[17] Divídelo en pedazos pequeños y después deja que se seque unas 24 horas.[18]
  7. 7
    Licúa el suero deshidratado hasta que se convierta en polvo. Puedes hacerlo en una licuadora, molinillo de café o un procesador de alimentos. Es posible que en este punto aún sientas húmedo el suero procesado a mano. Si esto te sucede, repite el proceso: extiende el suero de nuevo, espera 24 horas y luego tritúralo una vez más.[19]
  8. 8
    Guarda y usa el suero en polvo. Transfiere el suero a un recipiente con tapa, como un frasco. Mézclalo con batidos o licuados proteicos. También puedes incorporarlo en recetas horneadas, como muffins, cupcakes o bollos.

Método 3
Método 3 de 4:
Preparar proteína de suero rápido

  1. 1
    Licúa cantidades iguales de leche en polvo, copos de avena y almendras. Coloca 1 taza (240 ml) de leche instantánea, en polvo y descremada en una licuadora. Agrega 1 taza (80 gramos) de copos de avena normales o secos instantáneos y 1 taza (80 gramos) de almendras. Licúa todo hasta que se convierta en polvo fino.
    • No le agregues agua a la leche.
    • La leche en polvo contiene suero.
  2. 2
    Licúa el resto de la leche. Coloca las 2 tazas (475 ml) restantes de leche en polvo, instantánea y descremada en la licuadora. Pulsa la licuadora una vez más hasta que no queden grumos.
  3. 3
    Guarda la proteína en polvo en un recipiente grande. Usa un recipiente con una tapa bien ajustada, como un tarro. Mantenlo a temperatura ambiente y úsalo en 2 semanas. Si no podrás usarlo en ese tiempo, guárdalo en la refrigeradora: esto evitará que las almendras se echen a perder.
  4. 4
    Usa la proteína en polvo en batidos proteicos. Mide ½ taza (46 gramos) de la proteína en polvo en una licuadora. Agrega 1 ½ taza (350 mililitros) de leche (o cualquier otro líquido). Deja que la mezcla repose 5 a 10 minutos y luego añade cualquier extracto, fruta o yogur deseado. Licúa hasta que no queden grumos y después tómala.
    • Debes dejar que esta proteína en polvo repose 5 a 10 minutos para dejar que los copos de avena se deshagan.

Método 4
Método 4 de 4:
Darle sabor a la proteína de suero en polvo

  1. 1
    Crea tu base con proteína de suero en polvo y estevia. Combina 210 gramos (7 ½ onzas) de proteína en polvo y 3 paquetes de estevia en un recipiente. Posteriormente, escoge uno de los sabores de los pasos indicados a continuación. Usa la proteína en polvo como normalmente la utilizarías en batidos proteicos.
  2. 2
    Usa vainas de vainilla en polvo para preparar un sabor de vainilla francesa. Puedes comprar vainilla en polvo en una tienda o prepararla triturando 12 vainas de vainilla raspada y seca junto con 2 o 3 vainas de vainilla enteras. Añade 1 cucharada de este polvo en el recipiente. Ciérralo y luego agítalo para mezclarlo.
  3. 3
    Añade un poco de canela y vainilla en polvo para conseguir un licuado azucarado y dulce. Agrega 1 ½ cucharadita de canela en polvo y 1 cucharadita de vainilla en polvo en el recipiente. Ciérralo bien y agítalo para mezclar los ingredientes.
  4. 4
    Usa cacao en polvo para un sabor a chocolate. Vierte en el recipiente ¼ taza (25 gramos) de cacao negro en polvo de alta calidad. Ciérralo bien y luego mezcla los ingredientes.
    • Agrega 1 cucharada (3 gramos) de expreso instantáneo para un sabor de café moca.
  5. 5
    Dale un sabor único con té verde matcha en polvo. Compra un poco de té verde matcha. Mide 1 ½ cucharada (9 gramos) y agrégalo al recipiente. Cierra y luego agítalo hasta que todo se combine.

Consejos

  • Puedes usar proteína de suero para preparar batidos proteicos, cupcakes, bollos ¡e incluso té!
  • Puedes tomar batidos proteicos hechos de proteína de suero para el desayuno.[20]
  • Si quieres desarrollar músculo, toma un batido proteico a base de agua 1 hora antes de empezar a hacer ejercicios. También puedes usar soya o leche descremada en lugar de agua.[21]
  • Toma un batido proteico justo después del ejercicio para darte más energía.[22]
  • Si debes subir de peso, toma un batido proteico a base de leche antes de ir a dormir.[23]

Advertencias

  • La proteína de suero puede ser útil si quieres desarrollar músculo, pero si no te ejercitas lo suficiente, en realidad puede hacer que subas de peso.[24]
  • Toma batidos proteicos despacio para que no te enfermes.[25]

Cosas que necesitarás

Preparar proteína de suero desde cero

  • olla grande
  • tazón grande
  • termómetro de cocina
  • cuchara o cucharón
  • colador de malla fina
  • estameña
  • recipientes o bandejas pequeñas
  • deshidratador
  • recipiente con tapa (por ejemplo, un tarro)

Preparar proteína de suero del yogur

  • tazón
  • colador
  • estameña sin blanquear
  • olla
  • deshidratador o bandeja con papel pergamino o papel encerado
  • recipiente con tapa (por ejemplo, un tarro)

Preparar proteína de suero desde rápido

  • taza medidora
  • licuadora
  • recipiente o tarro con tapa

Acerca de este wikiHow

Claudia Carberry, RD, MS
Coescrito por:
Maestría en nutrición, universidad de Tennessee Knoxville
Este artículo fue coescrito por Claudia Carberry, RD, MS. Claudia Carberry es una dietista registrada especializada en trasplantes de riñón y asesora a pacientes para perder peso en la Universidad de Arkansas para Ciencias Médicas. Es miembro de la Academia de Nutrición y Dietética de Arkansas. Claudia recibió su maestría en nutrición en la Universidad de Tennessee Knoxville en 2010. Este artículo ha sido visto 25 271 veces.