Cómo despejar la mucosidad en la garganta

La flema es desagradable y repulsiva, pero en ocasiones se queda más tiempo de lo esperado. Por suerte, existen muchas formas de despejar la mucosidad en tu garganta. En este wikiHow, aprenderás a hacerlo.

Método 1

Método 1 de 4:
Practicar los cuidados básicos

1
Tose para despejar la flema o mucosidad de tu garganta. Si hay un exceso de flema en tu garganta, está bien sacarlo tosiendo un poco. Busca un lugar aislado (como un baño) e intenta despejar la flema de tu garganta tosiendo. Asegúrate de no toser demasiado fuerte o demasiado, ya que puedes causarte daños.
2
Haz gárgaras con agua tibia y sal. Disuelve 1 cucharadita de sal en 250 ml (8 oz) de agua tibia o a temperatura ambiente. Pon el agua en tu boca, inclina tu cabeza hacia atrás y haz gárgaras (sin tragar el agua) con la misma en la parte posterior de tu garganta.
3
Toma suficiente líquido durante el día. Los líquidos adecuados pueden ayudarte a despejar la flema de las paredes de la garganta, ya que los líquidos viajan hacia el esófago. Prueba las siguientes bebidas para reducir la flema:
- Té caliente con limón y miel. Esta debe ser una de tus armas principales para combatir la flema. La acidez del limón sirve para romper la flema, mientras que la miel recubre la garganta con una agradable capa protectora después de que el limón actúa.
- Sopa caliente. La sopa de pollo es una de las favoritas, debido a que es un caldo suave que corta la flema. Toma caldos ligeros en vez de sopas cremosas y pesadas.
- Agua fría. Escucha tu sed y toma toda el agua que necesites para permanecer hidratado.
4
Prueba con un tratamiento con vapor. Realiza un tratamiento con vapor, dejando que el vapor caliente viaje hasta tu pecho y garganta, debilitando la flema. Prueba los siguientes métodos para combatir la flema:
- Envuelve una toalla alrededor de tu cabeza y respira el vapor que sale del agua caliente. O mejor aún, vierte un poco de té (el de manzanilla funciona de maravilla) en un recipiente grande. Luego, con cuidado acerca tu cabeza al recipiente y respira el vapor.
- Toma una ducha con agua tibia. Si permaneces mucho tiempo debajo del agua, asegúrate de humectar tu cuerpo después de salir de la ducha, ya que el agua tibia despoja la piel de su humedad y aceites esenciales.
- Utiliza un humidificador o vaporizador. Deja que el humidificador bombee aire húmedo en tu habitación, pero ten cuidado de no bombear demasiada humedad en el aire.
5
Utiliza medicamentos para frenar la flema. Los medicamentos genéricos (como el Mucinex®) son de fácil acceso y sirven para debilitar y aflojar la flema. Busca medicamentos que digan "expectorantes", porque eso indica que sirven para eliminar la flema y la mucosidad.

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Método 2

Método 2 de 4:
Utilizar remedios de hierbas y naturales

1
Utiliza aceite de eucalipto. El aceite de eucalipto se ha utilizado durante mucho tiempo como medicamento herbal para tratar la flema. La forma más efectiva de utilizar el aceite de eucalipto es cubrir la parte superior del pecho con un aceite portador (como el aceite de coco) y luego frotar un par de gotas de aceite de eucalipto. Al principio, podría hacerte estornudar de forma inesperada, pero después de un tiempo puede ayudar a aflojar la flema de la garganta.
- Añadir un par de gotas de aceite de eucalipto a tu vaporizador es otra opción efectiva de tratamiento. No consumas el aceite de eucalipto por vía oral.
2
Añade cúrcuma en polvo a los líquidos que tomes para mantener activo el tracto digestivo. La cúrcuma también funciona como antiséptico. Añade 1 cucharada de cúrcuma y 1 cucharada de miel a 250 ml (8 oz) de agua caliente. Mézclalo. Toma el líquido y repítelo para obtener mejores resultados.
3
Come alimentos picantes para debilitar y aflojar la flema. La lista de alimentos picantes que pueden ayudar a combatir la flema es larga. Un par de alimentos que podrías incluir son:
- el wasabi o rábano picante
- los chiles como el jalapeño o el Anaheim
- el jengibre e incluso el ajo
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Método 3

Método 3 de 4:
Evitar los alimentos que producen flema y los productos irritantes

1
Mantente alejado de la leche y los productos lácteos. Si bien muchos refutan^{[1]
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Fuente de investigación} las pruebas que indican que los productos lácteos empeoran la flema, lo mejor es evitarlos si crees que tu flema puede empeorar después de tomar un vaso de leche. Esto se debe a que el contenido graso de la leche puede ser muy alto, lo cual fortalece la flema y la hace más irritante.
2
Mantente alejado de los productos de soya. Si bien los productos de soya (como la leche de soya, el tofu y el tempeh) son ricos en proteína y son buenos para la salud, pueden aumentar la viscosidad de la flema, cosa que hace que se acumule en el pecho. Si tienes otras opciones disponibles, lo mejor es actuar con cautela y evitar la soya.
3
Deja de fumar. Esta es otra razón (entre muchas otras razones) para dejar de fumar. Fumar irrita la garganta, empeora la función respiratoria y crea congestión.
4
Evita los otros productos irritantes como los químicos fuertes o las pinturas. Las pinturas y los limpiadores caseros como el amoníaco pueden irritar la nariz y la garganta, causando más producción de flema.

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Método 4

Método 4 de 4:
Diagnosticar el problema

1
Averigua si tienes un resfriado. Probablemente sepas si tienes o no un resfriado. Pero, ¿sabes por qué los resfriados vienen acompañados de flema persistente? La flema tiene dos funciones:^{[2]
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Fuente de investigación}
- Recubre los órganos, manteniéndolos hidratados y evitando que se resequen.
- Actúa como defensa primaria contra los contaminantes y las bacterias, que generalmente quedan atrapados en la flema antes de llegar al resto del cuerpo.
2
Averigua si tienes goteo posnasal. El goteo posnasal aparece cuando el cuerpo produce un exceso de mucosa y esta viaja hacia la garganta y no hacia la nariz.^{[3]
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Fuente de investigación} El goteo posnasal puede producirse a causa de resfriados, alergias, ciertos medicamentos (incluyendo los medicamentos para la hipertensión), desviaciones en el tabique de la nariz y por el vapor de agentes irritantes. Llama a tu médico si el goteo tiene mal olor o si dura más de 10 días.
3
Averigua si la flema se debe a alergias estacionales o a una reacción alérgica. Las alergias pueden estimular la producción de flema. La flema causada por las alergias generalmente tiene un color más claro, mientras que la flema causada por los resfriados o la gripe generalmente es de color amarillo verdoso.^{[4]
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Fuente de investigación} Si eres susceptible a las alergias, evita salir los días en los que la cuenta de polen sea muy alta. También aléjate de los siguientes elementos:
- el moho
- la caspa animal
- los ácaros de polvo
4
Ten presente que el embarazo puede exacerbar la producción de flema. Si acabas de averiguar que estás embarazada, esa podría ser la causa de tu problema de flema. Si bien no hay un medicamento específico para tratarlo (aparte de los descongestionantes), debes sentirte tranquila sabiendo que esta producción de flema no durará por siempre.

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Consejos

El agua caliente, el jugo de limón, la miel y un poco de canela conforman una bebida eficaz.
Dúchate con agua caliente todos los días. El vapor te permitirá respirar mejor.
Duerme bien y toma una taza caliente de té de hierbas.
Toma un baño con agua caliente antes de dormir. El vapor despejará las fosas nasales y el calor relajará tu cuerpo.
No tomes ningún lácteo como leche o leche chocolatada.
Empieza tu día con un vaso de agua tibia con 1 cucharada de miel.
Toma agua principalmente.
Bebe té u otras bebidas calientes.
Aléjate de la pintura y los vapores, ya que pueden obstruir aún más tu garganta.
Procura comer alimentos picantes.

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